"Nunca vi gestión tan lamentable como la de este Ayuntamiento"
Fernando Morán, líder de la oposición municipal socialista en el Consistorio madrileño, ha vuelto a la arena política tras superar un episodio vascular que algunos interpretan como la factura pagada por él en el esfuerzo electoral realizado el pasado 13-J. Junto al impulso de cohesión que, según afirma, trata de dar al grupo municipal socialista, admite que su continuidad -la forma en la que prefiere designar su sucesión- "ya se está haciendo y será fluida".
Fernando Morán, avilesino de 73 años, diplomático de profesión, es el líder de la oposición municipal en el Ayuntamiento de Madrid. Casado con María Luz Calvo-Sotelo, tienen dos hijas y un hijo, también diplomático. El político asturiano se encuentra ya restablecido de una dolencia vascular que le obligó a convalecer varias semanas el pasado verano. Se halla en forma para realizar un primer balance de la gestión socialista en el Consistorio madrileño desde las pasadas elecciones de junio y, también, para enjuiciar al equipo municipal de gobierno del PP, "siempre lejos de cualquier descalificación personal", señala reiteradamente.Pregunta.Algunos electores que dieron su voto a la izquierda en las últimas elecciones aseguran percibir un déficit de acción política desde la oposición municipal socialista que usted dirige. ¿Qué piensa?
Respuesta. Pienso que el régimen local, que rige el funcionamiento de los ayuntamientos, otorga muy pocas posibilidades y funciones a la oposición. No se trata de algo momentáneo, sino que forma parte de toda una cultura política derivada de la transición. Los ciudadanos piensan que la administración municipal es la más cercana, pero la administración local es el nivel de gobierno donde la oposición tiene menos facultades. Es una asignatura pendiente aún por aprobar.
P. ¿Qué opinión tiene de los miembros del grupo socialista de oposición?
R. Estoy muy contento con todos, concejales y técnicos, porque se trata de un grupo formado por personas competentes y entusiastas, que desarrollan sus cometidos con dedicación y entrega.
P. Entonces, ¿a qué cree que obedecen las críticas?
R. Nunca he visto una capacidad administrativa tan lamentable en ningún sitio como en este Ayuntamiento. No sólo la logística, que es anacrónica y cutre, diría que galdosiana. Que a los plenos municipales vayan hasta 78 puntos, por ejemplo, significa ni más ni menos que no hay debate político de fondo.
P. ¿Qué propone?
R. Pido un reglamento, que hoy, simplemente, no existe, y que se regule la existencia de plenos monográficos, con más debate sobre los grandes asuntos políticos.
P. A seis meses de las pasadas elecciones, ¿cuál es su balance sobre la gestión municipal del equipo de gobierno del Partido Popular?
R. No hay ninguna sorpresa, hace lo mismo que hacía antes. De vez en cuando surgen algunos tics autoritarios, como cuando el alcalde dijo aquello de "soy el jefe". Sin embargo, es una persona correcta y educada, salvo cuando tiene estos prontos. Este Ayuntamiento del PP no está a la altura de la coyuntura que ofrece este fin de siglo.
P. Pero ha vencido en las urnas...
R. Así es, la gente lo vota y los medios de opinión no ponen de manifiesto sus carencias. Todos somos responsables por ello. Hubo gente de izquierda que se abstuvo de votar entonces, y sólo por 30.000 votos no conseguimos la alcaldía. Así que tenemos lo que hay, por cuatro años más.
P. En ocasiones se ha dicho que Fernando Morán se retiraba. ¿Cuánto tiempo piensa permanecer al frente de la oposición municipal y cuál será su sucesión?
R. No se lo voy a decir a usted, pero ya veremos. Los electores deben estar tranquilos. Estoy cumpliendo la misión que ellos me encomendaron. Si opto por no ser portavoz, la continuidad, que no sucesión, quedará asegurada y será fluida, porque se está haciendo ya. Estoy dotando de cohesión al grupo municipal, dando actividad a ambas portavoces, Matilde Fernández y Cristina Narbona, cuyas relaciones son excelentes.
P. Cristina Narbona pareció preferir más el escaño parlamentario que su concejalía. ¿Cómo lo interpreta?
R. Matilde ha optado claramente por la concejalía. En cuanto a Cristina, tiene una gran vocación urbanística por la calidad de vida. No me parecen bien esas visiones tan radicales sobre la incompatibilidad entre un cometido municipal y otro parlamentario.
P. ¿Considera compatibles ambas funciones?
R. Me parecería muy bien que en el Congreso de los Diputados hubiera una cuota de hasta un 15% de representantes procedentes del mundo de la administración municipal.
P. Pero los electores desean la dedicación plena de sus representantes en uno y otro escenario.
R. Lo que sucede es que se está desarrollando una demagogia consistente en crear un complejo de culpa en la clase política, achacándole que no da el pecho. En Francia, los parlamentarios buscan su enraizamiento municipal, hay muchos casos en la historia que lo prueban. Me parece de una ingenuidad propia de novatos establecer una incompatibilidad tan rígida como la que aquí se propone. La opción de Cristina Narbona y de Matilde Fernández ha sido en favor de permanecer en el Ayuntamiento, porque la competencia de las dos es extraordinaria.
P. ¿Competencia o competitividad entre ambas?
R. Colaboran entre sí y su relación es buena. Sus cometidos están divididos en áreas. Trato de dar el mayor grado de autonomía a la gente que trabaja conmigo. Siempre ha sido ése mi estilo. Me encuentro muy satisfecho de cómo quedó la lista de nuestra candidatura para las elecciones municipales en Madrid. Sólo así las cosas van bien.
P. Ambas portavoces pertenecen a corrientes socialistas ideológicamente distintas.
R. No. No son neoliberales, ni socioliberales tampoco. Están por la socialdemocracia, con todas sus consecuencias. No veo diferencias ideológicas entre ellas.
P. Jaime Lissavetzky va a dejar la secretaría general de la Federación Socialista Madrileña. ¿Qué piensa de lo sucedido en la FSM?R. No me pareció bien la lista por Madrid y he votado a favor de un voto particular. No encuentro que haya guerras intestinas en la FSM; es una situación tolerable, aunque me hubiera gustado que el cabeza de lista de una corriente, Izquierda Socialista, tuviera una mejor colocación. Hay condiciones en Cataluña, Valencia, Madrid y Canarias para que los resultados de las elecciones generales permitan formar un Gobierno socialista.
P. ¿Cree al PSOE en condiciones de gobernar de nuevo?
R. En condiciones de formar Gobierno, sí. Con respecto a 1982, el PSOE tiene el inconveniente de haber sufrido desgastes, pero cuenta con la ventaja de una experiencia mayor en la gestión política. Además, ya no existe la necesidad que había entonces de buscar personas fuera del partido para las tareas políticas. Catorce años de experiencia de Gobierno hacen más difíciles los errores. También hubo triunfos.
P. ¿Cuáles destaca?
R. Fue muy importante la definición del papel internacional de España, la corrección del desequilibrio existente en las relaciones bilaterales con Estados Unidos y el equilibrio en el norte de África. En el interior, fue un triunfo la extensión de la cobertura social a las pensiones no retributivas y el desarrollo de la estructura territorial del Estado.
P. ¿Qué subraya de la gestión socialista de los municipios?
R. En 1979 hubo un gran avance. No había ni siquiera marquesinas para que los niños se protegieran de la lluvia en las paradas de autobuses. Aunque luego se produjo una disminución de aquel aceleramiento. La atención se centró en el desarrollo de la dimensión autonómica y el Ayuntamiento no recuperó las competencias que debían corresponderle.
P. ¿Qué piensa de la destitución judicial de Jesús Gil como presidente del Atlético de Madrid?
R. Debo suponer que ha sido una decisión conforme a la ley.
P. ¿La saluda o la rechaza?
R. Todo cumplimiento de la ley me parece positivo. Las leyes están para cumplirlas. Naturalmente, no voy ni contra Gil, ni contra el Atlético de Madrid, que es una institución que pertenece a los valores y a la cultura de esta ciudad. Pero la simpatía por este club no puede llevar a poner en cuestión una acción judicial. Deseo que esa decisión no afecte para nada a esa institución futbolística. Sí lamento los cinco goles que le ha marcado el Atleti a mis dos equipos favoritos, el Oviedo y el Sporting de Gijón.
P. Hace unos días se han hallado dos furgonetas de ETA cargadas de explosivos con destino a Madrid. Los ciudadanos experimentan zozobra. Como líder de la oposición municipal, ¿qué mensaje les transmitiría?
R. Que apoyen al Gobierno y a las fuerzas de seguridad, y mantengan la serenidad y el humor.
P. Por cierto, flanqueado por Matilde Fernández y Cristina Narbona, se dice que usted parece un Don Hilarión.
R. Las dos son morenas.
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