Lagos nombra directora de campaña a una ministra democristiana
En el primer efecto concreto del inesperado empate entre el candidato socialista Ricardo Lagos y el derechista Joaquín Lavín, que ha forzado la segunda vuelta en las elecciones presidenciales chilenas, ha sido la renuncia de la ministra de Justicia, Soledad Alvear, la integrante del Gabinete mejor evaluada en los seis años de gobierno de Eduardo Frei, para asumir de inmediato la dirección del equipo electoral de Lagos.
La coalición oficialista, después de numerosas sesiones de autocrítica el pasado lunes, decidió incorporar ayer colocar a nuevas personas en las tareas directivas de la campaña, sin destituir a quienes las realizaban antes, para evitar conflictos internos, en una especie de "terapia indolora", como comentó un dirigente. El presidente de la Cámara de Diputados, el socialista Carlos Montes, a petición de Lagos, tomó bajo su responsabilidad la campaña en los municipios, en especial en aquellas zonas urbanas de menores ingresos, muy pobladas y tradicionales bastiones de la izquierda, donde la derecha experimentó una subida en la votación del domingo pasado.
Otro refuerzo es la senadora democratacristiana Carmen Frei, hermana del presidente chileno, curtida en el trabajo en las barriadas más populares, y una figura emblemática del mundo democratacristiano.
Por su parte, Alvear, esposa del presidente del Partido Demócrata Cristiano, el diputado Gutenberg Martínez, dejó su cargo en el Gobierno acompañada por un grupo de asesores. Su nueva tarea tendrá como misión primordial aumentar los resultados de Lagos entre las mujeres, donde Lavín se impuso con un 50% frente a un 45%, revirtiendo los resultados de anteriores elecciones.
En Chile, los hombres y mujeres no sólo votan en mesas aparte, sino también en recintos diferentes, salvo excepciones, lo que permite saber con facilidad los resultados diferenciados según sexos. Históricamente, el voto femenino ha sido más conservador que el masculino, salvo en esta década, en que las tendencias se igualaron, al parecer debido al efecto de la incorporación de la mujer al trabajo. Pero en esta elección Lavín sacó ventaja y en algunos municipios dobló a Lagos entre las mujeres. Alvear, que encabezó la reforma procesal penal chilena, para implantar el juicio oral, la más profunda hecha en un siglo al sistema judicial, tendrá por delante la tarea de influir en las votantes.
