Guipúzcoa responsabilizará al Gobierno de los retrasos en la Éibar-Vitoria
La Diputación de Guipúzcoa advirtió ayer del peligro que se cierne sobre la autopista Éibar-Vitoria (A-1) si el Gobierno vasco no aumenta su contribución económica. El diputado de Carreteras, Antton Jaime, quiso cargar sobre el Ejecutivo vasco toda la responsabilidad del incumplimiento del plazo previsto para acabar las obras. Insistió en que los 5.000 millones que recogen los próximos Presupuestos vascos son "insuficientes", aunque confesó que Guipúzcoa tiene recursos para afrontar toda la inversión.
El diputado de Carreteras y Transportes de Guipúzcoa, Antton Jaime (EA), volvió a exigir al Gobierno vasco una mayor implicación en la financiación de la autopista Éibar-Vitoria (A-1), cuyo coste total asciende a unos 100.000 millones de pesetas (601 millones de euros), de los que Guipúzcoa cubrirá un 85% aproximadamente. Jaime afirmó ayer que la apertura de esta carretera en el plazo previsto (el año 2004 en la parte guipuzcoana) dependerá de la aportación económica del Gobierno vasco.Los 5.000 millones de pesetas (30 millones de euros) que ha reservado el Ejecutivo vasco para el capítulo de carreteras durante el próximo ejercicio han desalentado a la Diputación de Guipúzcoa, que se resigna calificándolos como "un primer paso", pero "insuficientes". Jaime suele poner como ejemplo que un kilómetro de la A-1 cuesta alrededor de 2.000 millones de pesetas.
La entidad foral reclama a los gobiernos central y vasco 30.000 millones de pesetas para afrontar con garantías la construcción de su tramo en cumplimiento de las fechas previstas en el Plan General de Carreteras, actualmente en fase de revisión. No obstante, Jaime reconoció ayer que las arcas forales poseen los recursos necesarios para afrontar "en solitario" el coste completo de las obras.
Agravio comparativo
Según los cálculos de la Diputación, existe comprometida una cantidad de 23.000 millones de pesetas, resultante de las bajas registradas en la adjudicación de los tramos que están ahora mismo en construcción. Por otro lado, el Plan Extraordinario Guipúzcoa 2003 asigna una partida plurianual de 30.000 millones hasta el año 2004, y los 32.000 millones restantes provendrán del peaje.
El responsable guipuzcoano de Carreteras advirtió del "agravio comparativo" que supondría no apoyar económicamente la construcción de esta vía, por lo que solicitó más recursos por razones de "solidaridad interterritorial". La petición, aunque en otros términos, también se extiende a la Diputación alavesa, a la que solicita que acelere los trámites para comenzar los trabajos.
Jaime presentó ayer los presupuestos de su departamento para el año 2000, que alcanzan los 25.379 millones de pesetas (152,5 millones de euros), un 37,6% más que este año. Del total, el 89% corresponderá a inversiones reales, entre las que destacan la continuación de las obras de la A-1 y las variantes de Pasaia y el Urumea.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.