El Supremo dice que la Policía Judicial sólo debe obedecer a jueces y fiscales

El Tribunal Supremo ha subrayado en una sentencia, por la que se absuelve a dos personas que llevaban dos años y medio en prisión por un delito de narcotráfico, que las Fuerzas de Seguridad, actuando en calidad de Policía Judicial, sólo tienen como superiores a jueces y fiscales. Dos guardias civiles hicieron caso omiso a las condiciones de un juez para abrir unos paquetes que se sospechaba contenían droga y ese motivo ha generado la nulidad de las actuaciones policiales.Dos guardias civiles encuentran en el aeropuerto de Barajas el 25 de mayo de 1995 cinco paquetes remitidos desde Bogotá. Sospechan que en su interior puede haber un cargamento de droga. Los miembros del instituto armado, bajo dirección de su jefe, pretenden realizar una entrega controlada. Al pedir la autorización judicial, el juez instructor explica que la apertura de los cinco paquetes, de 247 kilogramos en total, "debía efectuarse a presencia de los destinatarios y con intervención judicial".

Según la resolución, cuyo ponente es el magistrado de la Sala Segunda Joaquín Giménez, el propio juez aseguró que no había ningún problema por el peso de los bultos y que "la comisión judicial se desplazaría hasta el lugar donde estuvieron retenidos los paquetes para proceder a su apertura".

Los agentes no dejaron petición ni escrito al juez y se marcharon indicando que "tenían que consultar con sus superiores". Finalmente, se abrió uno de los paquetes, sin ningún control o presencia judicial, y se encontró cocaína en su interior. Según la sala, el proceder de los guardias es el "ejemplo más acabado del quebrantamiento del deber de lealtad y colaboración con la autoridad judicial...".

La sentencia subraya que la apelación a "sus superiores" es la "acabada expresión de la prevalencia de la vía orgánica sobre la funcional, que fue la que finalmente prosperó con olvido de que en cuanto Policía Judicial, los superiores son los tribunales y el ministerio fiscal". Las dos personas que fueron a recoger los paquetes -Emilio Rufo y Guillermo Darío- fueron condenadas, cada una, a más de nueve años. Ahora el Supremo revoca la sentencia.