San Sebastián diseña un plan para modernizar el transporte público

El Ayuntamiento de San Sebastián quiere aplicar un paquete de medidas para favorecer la utilización del transporte urbano con el fin de mejorar la movilidad en la ciudad. El equipo de gobierno ha diseñado un plan de modernización del transporte público, que se ejecutará durante este cuatrienio si recibe la aprobación en la próxima reunión del Consejo de Administración de la Compañía del Tranvía de San Sebastián, prevista para la semana entrante, según anunció ayer el alcalde, Odón Elorza.Este proyecto, todavía en fase de acuerdo político, propone numerosos cambios en el funcionamiento del transporte público, que es utilizado por unos 27 millones de viajeros al cabo del año. Entre las medidas planteadas en este proyecto se encuentra la eliminación de puntos negros de la circulación y la adecuación de paradas y apartaderos.

Además de reivindicar ante el Gobierno vasco y la Diputación de Guipúzcoa las ayudas económicas para paliar el déficit económico de la compañía de autobuses, en este documento se avanza la nueva política tarifaria, que Elorza no quiso desvelar antes de presentarla ante el órgano de control de la compañía. También se propone mejorar los accesos a los autobuses con la adquisición de vehículos de plataforma baja y aumentar la flota de vehículos articulados.

Elorza sólo explicó ayer las líneas maestras de este plan de modernización, donde se incluyen la regulación estricta y controlada de las zonas de carga y descarga en las calles de paso preferente de las líneas de autobuses y el establecimiento de nuevas líneas de conexión directa entre los barrios.

Carta de derechos del cliente

Este ambicioso libro blanco del transporte público de la capital guipuzcoana recomienda colocar paneles informativos en las paradas que proporcionen la frecuencia exacta entre autobuses y el tiempo que tardará en llegar el siguiente, así como las conexiones posibles en ese punto. Aumentará la red de carriles-bus, se mejorarán las cocheras, que se construirán en una superficie de 24.500 metros cuadrados junto a su emplazamiento actual y costarán 1.180 millones de pesetas (siete millones de euros).

La modernización pasa también por la elaboración de una carta de derechos del cliente, donde se recogerán medidas para mejorar el trato de los conductores a los viajeros. Ello se completará con unas campañas de imagen y acciones para aumentar el protagonismo de los trabajadores de la compañía de autobuses.

También hay referencias a las posibilidades existentes para contruir un metro ligero en superficie y sobre el Consorcio del Transporte de la comarca de Donostialdea, en el que figuran los tres niveles de la administración vasca.

Odón Elorza afirmó que estas medidas van a convertir este mandato en "la legislatura del transporte público".