Ernest Maragall defiende el modelo de BTV ante a los ataques de CiU

El concejal socialista del Ayuntamiento de Barcelona, Ernest Maragall, que preside el Consejo de Administración de la entidad que gestiona Barcelona Televisió (BTV), defendió ayer el modelo de este canal local frente a los ataques lanzados la víspera por el portavoz de CiU, Josep Miró Ardèvol, en el consistorio barcelonés. "Se le debían cruzar los cables, literalmente", dijo Maragall, "cuando puso a la Corporación Catalana de Radio y Televisión (CCRTV) como ejemplo de funcionamiento para BTV". El miércoles, el portavoz de CiU calificó de "escandaloso" el funcionamiento de BTV, criticó a los socialistas por "pretender predicar mejoras en otras televisiones públicas" y anunció iniciativas para instaurar en BTV "procesos internos más participativos y democráticos", que supongan "más garantías hacia los ciudadanos".

Maragall respondió ayer que BTV es "un modelo magnífico de televisión local, que es referencia europea" y dijo que la comparación que hizo Miró con la CCRTV "debería ser estrictamente inversa" ya que "obviamente, si tenemos que comparar desde el punto de vista de la pluralidad y el respeto a la diversidad de opiniones, BTV ganaría por 5 a 0". El concejal socialista argumentó que "no ha habido quejas por el comportamiento" de BTV durante las elecciones, pero "sí que las ha habido" en el caso de TV-3.

Menor coste por ciudadano

El portavoz de CiU reveló el miércoles que el consistorio barcelonés destinó a BTV 850 millones de pesetas en 1998. "Los medios de comunicación públicos que dependen del Ayuntamiento cuestan a los ciudadanos casi tres millones de pesetas cada día", dijo Miró. Ayer, Maragall le respondió recordando que la televisión catalana supone un coste muy superior al de Barcelona. "En el tema económico", añadió, "pasa lo contrario, y es TV-3 quien gana 5 a 0 a BTV, porque el coste por ciudadano, el déficit de la institución y la estructura de endeudamiento es espectacular en el caso de la CCRTV, y perfectamente descriptible en el caso de BTV".

No obstante, Maragall anunció ayer que se está trabajando en mejorar el modelo de BTV. "Estamos a punto de hacer una propuesta de renovación de las composiciones y de los modelos de gestión y de designación del consejo y de su dirección", dijo, "porque estamos convencidos de que efectivamente tenemos que ser los primeros en este sentido, pero no para remediar ningún mal, sino porque podemos hacerlo con toda tranquilidad". El concejal socialista dejó entrever que el cambio podría comportar su relevo en el cargo.

En este sentido, el portavoz de IC-V, Jordi Guillot, reclamó ayer que los medios de comunicación local de titularidad pública, entre los que citó a BTV, se doten de mecanismos para "garantizar el rigor, la calidad y criterios de pluralidad" en sus emisiones. Guillot considera que la izquierda, allí donde gobiernan, "debe ser coherente" para "ganar credibilidad ante CiU".