Duran reitera que CiU quiere pactar con ERC y los republicanos le culpan del fracaso de la negociación
El presidente del comité de gobierno de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, negó ayer que CiU haya alcanzado un acuerdo de gobierno con el Partido Popular (PP) y reiteró que la coalición continúa apostando por pactar con Esquerra Republicana (ERC). Los independentistas, que negaron el viernes cualquier posibilidad de acuerdo, rebajaron ayer sus postulados y recuperaron su discurso tradicional: ERC podría abstenerse en la investidura de Jordi Pujol si éste acepta sus puntos programáticos. ERC culpa precisamente a Duran de la falta de acuerdo.Unió celebró ayer un acto político en Torrelles (Baix Llobregat) para conmemorar el 68º aniversario de la fundación del partido. La fiesta estuvo a punto de costarle cara a Duran, que evitó por los pelos que una parte del decorado le cayera encima al esquivarla en el último momento. En tono de humor, afirmó: "No subo al Aneto [como hizo Jordi Pujol para convocar las últimas elecciones], pero ya veis que estoy en forma".
Duran reiteró que el objetivo de CiU es lograr un pacto con ERC: "Llamaremos a las puertas una, dos, tres y cuantas veces haga falta", subrayó. Para negar la existencia de un acuerdo con el PP, con el que CiU pactó el viernes la composición de la Mesa del Parlament, Duran argumentó que, si hubiera un acuerdo, el Gobierno no habría llevado al Tribunal Constitucional la ley de selecciones deportivas catalanas.
El presidente del comité de gobierno de Unió reiteró que CiU propuso un acuerdo político a ERC, pero que los republicanos lo rechazaron. "Que sea primero el PP que ERC no es un capricho nuestro", señaló. Duran añadió que CiU "hará todo lo posible para que en Cataluña no haya dos bloques, uno nacionalista y uno no nacionalista".
El vicesecretario general de ERC Carles Bonet respondió ayer mismo con indignación a las palabras de Duran, a quien consideró el principal escollo para el entendimiento. "Duran sólo ha hecho un simulacro de negociación porque era el primer interesado en que estas conversaciones no prosperaran", aseguró en declaraciones a Efe. En opinión de Bonet, "sólo hay dos personas en Cataluña que no quieren un pacto entre CiU y ERC: Pasqual Maragall, por razones obvias, y Duran, porque quiere ser el sucesor de Jordi Pujol y aspira a tener todo el pastel para él, sin compartir protagonismo con ERC".
Josep Huguet, también vicesecretario general de ERC y portavoz en el Parlament, advirtió ayer que los dirigentes de Esquerra no permitirán que se les "vuelva a utilizar" como "figurantes de una comedia con un papel de segunda fila". Si el viernes ERC rechazó toda posibilidad de llegar a un acuerdo con Convergència para facilitar la investidura de Jordi Pujol, ayer Huguet volvió a los postulados clásicos de ERC al afirmar que el lunes presentará a CiU una lista de 15 iniciativas legislativas. En caso de que fueran asumidas, añadió, los republicanos podrían abstenerse en la sesión de investidura.
