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ESCENA

Les Luthiers recetan 'Bromato de Armonio' para provocar cosquillas en los rincones del alma

El grupo argentino Les Luthiers presenta esta noche en Madrid su nuevo espectáculo Bromato de Armonio, un fármaco para provocar cosquillas en los rincones del alma. Permanecerán un mes en el Palacio de Congresos. Desde hace ocho días están agotadas las localidades para todas las funciones.Les Luthiers, los fabricantes de los más extraños instrumentos jamás tocados, irrumpieron en los escenarios hace más de 30 años, después de conocerse en una coral universitaria. Desde entonces han sido el rayo que no cesa, con esporádicos parones debidos no tanto a la vagancia como a un afán riguroso de perfeccionismo. ¿Cuál es el secreto para permanecer unidos después de tanto tiempo? Contesta Jorge Maronna: "¿Tiene usted tiempo suficiente para que se lo explique?". Ellos son muy diversos: López Puccio dirige el Estudio Coral de Buenos Aires; Mundstock es columnista del diario Perfil; Maronna sólo se dedica a la música; Núñez Cortés es un experto en malacología (estudio de los moluscos marinos) y Rabinovich es un maestro del billar a tres bandas.

Bromato de Armonio ha sido considerado por la crítica argentina como uno de sus espectáculos más depurados. Parece que el grupo vuelca su humor en temas de actualidad, desde un presidente que intenta cambiar la letra del himno nacional hasta el grupo de monjes que da sus clases de educación sexual con música gregoriana.

Aunque mantienen el sonido de sus "instrumentos informales", como ellos mismos les llaman, esta vez ganan espacio los teclados electrónicos de origen japonés y siguen ahondando en una de las claves del humor universal, la palabra. Manejan el castellano magistralmente y juegan con las palabras de una forma desternillante e impecable. Al contrario que otros artistas, no suelen introducir localismos lingüísticos. Todo el grupo lo tiene claro, pero Rabinovich remacha: "No nos gusta utilizar giros locales. El nuestro es un castellano neutro, que puede ser entendido en cualquier sitio de habla hispana. Pretendemos hacer un humor universal".

En Bromato de Armonio, el inefable Johann Sebastian Mastropiero se hace carne por primera vez en un escenario y se mete en el cuerpo de Marcos Mundstock. Hacen un recorrido musical por las sonatas medievales, la música de jazz y sus propias composiciones, tocadas con cosas como una bicicleta, un órgano de campaña o una gaita de cámara.

Les Luthiers vienen a España cada tres años. En Buenos Aires han estrenado ya el espectáculo que traerán a España en el 2002, Todo por que rías.

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