El pleno malagueño impedirá construir en los terrenos de Renfe hasta que se remodele la estación
El pleno del Ayuntamiento de Málaga acordó ayer no conceder ninguna licencia para viviendas en los terrenos vinculados al Plan Especial de Renfe hasta que no esté completada toda la obra pública prevista por la compañía ferroviaria en su estación y en los terrenos anejos. La iniciativa partió del PSOE tras conocerse que Renfe podría obtener hasta 4.450 millones de pesetas en plusvalías por la venta de estos terrenos, una vez que han sido recalificados. La compañía negó ayer que la venta estuviera formalizada, aunque reconoció que la parcela había sido subastada.
Para el PSOE, la iniciativa condiciona, en cierta medida, una operación urbanística de Renfe que considera "especulativa". Aunque Izquierda Unida la apoyó, su portavoz, Rafael Rodríguez, restó trascendencia a la medida e incluso dudó de que el consistorio tenga capacidad para condicionar un "trámite meramente formal, como es solicitar los permisos para construir sobre unos terrenos que una empresa ha adquirido".Renfe, que ha subastado los terrenos ociosos de la estación que han sido recalificados, no ha acometido sin embargo de momento su compromiso de remodelar la estación central, como contempla el plan especial de la zona aprobado hace un año.
Rodríguez insiste en que las parcelas están "realmente condicionadas" por el acuerdo plenario del pasado mes de octubre que obligaba a incluir el soterramiento de las vías del tren que atraviesan el casco urbano en el proyecto de remodelación de la estación. El PP, a pesar de considerar que es el mercado el que debe regular estas situaciones, aceptó finalmente la propuesta socialista.
Matices
La operación urbanística de Renfe generó ayer una intensa polémica en Málaga, lo que obligó incluso a la compañía a emitir un comunicado matizando la información desvelada por el grupo municipal del PSOE. Renfe indicó que la venta de la parcela no estaba formalizada, aunque reconoció que la subasta se realizó a finales del mes de septiembre y que a ella optaron 16 empresas. La compañía indicó que ahora tiene dos meses para analizar las ofertas, aunque no mencionó en su comunicado que los terrenos salieron al mercado por 972 millones de pesetas y que la empresa Azvi Bética de Construcciones SA ofreció 5.420 millones de pesetas, según reiteró el PSOE.
Esta formación política insiste en que era una subasta con sobres cerrados y al mejor postor, donde sólo se atendían criterios económicos, por lo que se reiteran en el "pelotazo urbanístico" que puede dar Renfe con la recalificación de los terrenos.
La alcaldesa de Málaga, Celia Villalobos, evitó ayer pronunciarse sobre el polémico asunto. Eso si, Villalobos por primera vez declaró que asumía toda la responsabilidad política por la clausura del Palacio de los Deportes de la ciudad, algo a lo que se había negado de forma reiterada desde que se cerraron las instalaciones aduciendo que el caso era achacable exclusivamente a un error de Ferrovial, la empresa constructora.
Villalobos usó una fórmula muy peculiar. "Hay quien quiere que asuma la responsabilidad política por esto. Si quieren que la asuma, yo lo hago: Yo soy la única responsable política", declaró ante un grupo de periodistas.
En parecidos términos se expresó la primera edil de Málaga, aunque en aquella ocasión de una manera bastante más irónica, hace unos días en Barcelona, coincidiendo con su visita a una feria inmobiliaria.
"La responsabilidad política la tengo yo, y punto, de todo lo que pase, bueno o malo, en el Ayuntamiento, que soy la alcaldesa", indicó. "También soy responsable de que el tren de alta velocidad esté aquí, también de esto, porque esas son mis obligaciones. Unas veces me producen satisfacciones y otras disgustos", dijo.
