De Leganés norte
Tengo 30 años y vivo en Leganés desde los cuatro. Hace dos años empecé a residir en el nuevo barrio de Leganés norte.Dice nuestro alcalde que no comparte ni comprende que pidamos que se vayan las familias realojadas procedentes de poblados marginales. No sé dónde vive el alcalde, pero seguro que no tiene por vecinos a ninguna de ellas, que no comparte con ellas comercios, bares ni infraestructuras comunes, que no tiene miedo de protestar cuando se "cuelan" en la cola de una tienda o en la parada del autobús, que sus hijos no comparten columpios con los niños de estas familias, que no les dejan jugar porque dicen que eso es suyo.
Seguro que el alcalde no les ha visto "tomar prestadas" algunas de las cosas que hay en las obras todavía abiertas y se ha dado la vuelta para evitar problemas. Nuestro alcalde no tendrá que atravesar por la noche los pasos que se han abierto debajo de la estación de cercanías mirando hacia atrás con precaución y temor. Seguro que a él no le han increpado o molestado mientras tomaba algo en alguna terraza este verano.
Dése un paseo solo, sin escolta, como un vecino cualquiera, una noche por nuestro barrio. Hable con los comerciantes, con los vecinos, con los dueños de los bares. Compruebe si ha aumentado el número de denuncias y actuaciones policiales en Leganés desde que viven aquí estas familias.
No sé si somos racistas o no. Lo que sé es que yo quiero un barrio tranquilo y limpio, donde mis hijos puedan pasear y jugar sin miedo, que es lo que en realidad nos vendieron. Si no, habrá que cambiar de barrio.- .
