Apuesta
El Partido Andalucista se pronuncia a favor de la no coincidencia entre elecciones generales y autonómicas. Petición a la que se ha unido IU. Como telón de justificación, las elecciones catalanas, la forma en la que se ha llevado la campaña, que el debate regional se vería afectado por la coincidencia de las elecciones o que, al presidente de nuestra comunidad le importa más Madrid que Andalucía.La referencia a las elecciones catalanas, tal vez, puede servir para opinar de forma distinta. Son elecciones que han destacado por la baja participación ciudadana y por el lucimiento personal de los políticos, hasta el punto que Jordi Pujol ha empleado con frecuencia el castellano, en el que, por cierto, se trabuca menos que en catalán. También ha destacado Julio Anguita. Ha conseguido rizar el rizo, que le voten los suficientes para no alcanzar ninguna representatividad y que sean bastantes para que gobierne la derecha. Un dato más, denominador de todas las elecciones: la mayor participación se da en las generales y favorece a la izquierda, salvo que meta gol en propia puerta.
Con estas circunstancias no parece razonable, aunque sólo sea desde el pragmatismo que caracteriza a nuestra clase política, que el presidente de un gobierno de izquierdas convoque unas elecciones en las que, si se realizan en fecha distinta de las generales, la menor participación beneficia a sus adversarios, sobre todo cuando no sería nada extraño que la IU andaluza, en un arrebato de su líder, pueda intentar que Andalucía se quede sin playas, a pesar de que linda con la mar.
Sin embargo, a veces, pragmatismo e interés ciudadano pueden coincidir. Si vivimos una época, como dice Victoria Camps, en la que existe una falta de compromiso del ciudadano, puesto que se limita a medio cumplir las leyes y a delegar en los políticos toda acción social, lo que sea disminuir el absentismo electoral y favorecer su presencia es incrementar su implicación con la sociedad. Si las cosas son así, debería apostarse por la coincidencia, aparte de que es conveniente no perder de vista Madrid, ya que no quita ojo a Andalucía, lo demás se da por supuesto, ahí están los presupuestos generales del Estado.
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