_
_
_
_

"En las cúpulas del PSC y CiU está la clase alta de Barcelona"

Pregunta. Usted asegura que sea cual sea el resultado del 17 de octubre, no entrará en un hipotético Gobierno en el que pudiera estar el PP. ¿Por qué?Respuesta. Nos hemos comprometido a ello por escrito ante el Síndic de Greuges . Este compromiso nos distingue del PSOE, que prometió centenares de miles de puestos de trabajo y que [España] no entraría en la OTAN. También nos distingue de CiU, que dijo que nunca pactaría con el PP y luego ha apoyado al Gobierno de José María Aznar y ha establecido multitud de alianzas con el PP en el Parlament de Catalunya.

P. ¿Cuál es su propuesta de gobierno en Cataluña?

R. Un Gobierno tripartito entre CiU, los socialistas e Iniciativa y ERC. Entendemos que Cataluña ha avanzado siempre a base de prácticas unitarias y, si hemos de empezar el siglo XXI con retos colectivos como la descentralización, la política social, un nuevo Estatut o un nuevo sistema de financiación, debemos avanzar juntos.

P. ¿Excluyendo al PP?

R. Yo rompo la ligazón entre CiU y el PP ya que creo que es imperdonable lo que hacen algunos dirigentes nacionalistas cuando piden el voto a un sector del electorado del PP y, al mismo tiempo, lo piden a una parte de nuestro electorado. Esto es impresentable, porque si hay dos votos que son antagónicos, éstos son los del PP y de ERC.

P. Usted pide el respaldo electoral de los votantes progresistas de CiU.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

R. Sí, reclamo este voto, entre otras cosas, porque a Madrid le interesa que aquí se mantenga el statu quo nacionalista de Jordi Pujol. Lo que preocupará en Madrid es que ERC pase por delante del PP.

P. También pide el voto a la izquierda clásica de corte social.

R. Existe una izquierda social histórica, que fue antifranquista y que nunca votará al PSOE. Esta izquierda coincide con nosotros.

P. Las encuestas no le son favorables y usted responde que quiere una campaña electoral sin encuestas.

R. No es eso. Nosotros siempre hemos dicho que las encuestas son otra arma de la que disponen aquellos que ya lo controlan todo. Los partidos pequeños salimos perdiendo porque los que tienen la complicidad de los poderes económicos y mediáticos tienen también la ayuda de las encuestas.

P. Pujol gana en las encuestas y lleva 19 años en el poder. Dicho de otro modo: si la gente está contenta, ¿por qué tendría que confiar en otra opción, como la que usted representa?

R. Hasta ahora, Cataluña ha tenido 19 años de centro liberal en manos de Jordi Pujol y, a partir de ahora, se presenta otro centro liberal en manos de Pasqual Maragall. Ante este empacho de centro liberal, aparece ERC, que, en el terreno democrático y en el terreno nacional, puede dar un salto hacia delante.

P. ¿No es un poco antidemocrática la exclusión permanente del PP?

R. Yo no conozco a nadie en otros países que diga que está dispuesto a gobernar con cualquier partido. Ya sabemos que CiU ha coincidido y coincide con el PP dándole apoyo parlamentario en el Congreso; también sabemos que el PSOE en Navarra ha permitido que gobierne el PP. Pero nosotros, no.

P. ¿Mantiene usted que los socialistas catalanes no pueden practicar el socialismo porque pondrían en peligro sus patrimonios familiares?

R. Mantengo que en las cúpulas de los dos grandes partidos, el PSC y también CiU, está instalada gente bien, es decir, miembros de la endogamia social y política de la clase alta de Barcelona. En cambio, la mayoría de la población no pertenece a esta clase ni vive en esta zona de Barcelona.

P. ¿Usted quiere que en Cataluña sólo se hable catalán?

R. Yo lo que no quiero es que los poderes públicos en Cataluña dejen a una parte de la sociedad hablando sólo en castellano. Lo que quiero es que en Cataluña los jóvenes puedan crecer conociendo tres lenguas: el catalán, el castellano y el inglés. Apostamos por una Cataluña trilingüe, con el catalán como lengua nacional común, pero en la que todo el mundo pueda aprender catalán, castellano e inglés.

P. ¿En su Cataluña, el castellano dejará de ser lengua oficial?

R. No. Nosotros no hemos dicho que el castellano deje de tener su estado de lengua oficial. Lo que digo es que la defensa del catalán es el único patrimonio cultural insustituible, porque es nuestra aportación a la humanidad. Si no defendemos nosotros el catalán, ¿quién lo defenderá?

P. ¿Se ha olvidado del independentismo?

R. No. Hablo poco del independentismo precisamente porque no lo he olvidado. Creo que defender las necesidades de la gente es un paso previo y prioritario. ERC quiere que en el horizonte europeo Cataluña tenga una capacidad de interlocución como la pueden tener Dinamarca o Luxemburgo.

P. ¿Se ha vuelto usted gradualista?

R. Me he convertido en un gradualista práctico. Nadie puede presentar un programa nacional hacia la soberanía de Cataluña sin presentar primero un programa práctico sobre salud, vivienda, pensiones, etcétera. La ERC de antes sólo hablaba del horizonte de independencia y ahora hablamos del hoy.

P. ¿ERC ha perdido la utopía?

R. Para un partido de izquierdas, la utopía nunca se acaba.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_