Zaplana afronta el recorte de inversiones y el inicio de curso en la sesión de control en Cortes

La primera comparecencia de Eduardo Zaplana en las sesiones de control parlamentario ante las Cortes Valencianas durante la presente legislatura llega cargada de contenido. El Grupo Socialista ha formulado una pregunta sobre el acuerdo del Consell, adoptado el 16 de agosto, que congela las inversiones de la Generalitat y todas las transferencias de capital destinadas a otras instituciones. Esquerra Unida, por su parte, requiere el presidente de la Generalitat que explique los problemas que han rodeado el inicio del curso no universitario con mención especial a los polémicos conciertos aprobados por la Consejería de Educación con una serie de colegios de élite y vinculados al Opus Dei.

Eduardo Zaplana desarrolló una depurada técnica durante la pasada legislatura para eludir las preguntas espinosas en las sesiones de control parlamentario. La mecánica de las comparecencias del presidente permite esquivar las cuestiones molestas, pero Zaplana tendrá que esforzarse para salvar la cara el próximo jueves.Antonio Moreno, nuevo portavoz del Grupo Socialista, pedirá explicaciones sobre el acuerdo del Consell que faculta al responsable de Economía y Hacienda, Vicente Rambla, para congelar los fondos destinados a las inversiones previstas por la Generalitat, sus organismos autónomos y otras instituciones a partir de finales de agosto.

El acuerdo se adoptó para afrontar compromisos de pago "ineludibles" pendientes del ejercicio anterior y para hacer frente a los gastos corrientes de Educación y Sanidad hasta fin de año. Fuentes socialistas cifran el volumen del recorte en unos 50.000 millones de pesetas, de acuerdo con la liquidación del presupuesto de finales de julio. Fuentes de la Generalitat, por su parte, rebajan sustancialmente esa cifra sin mayores precisiones. Sin embargo, sólo en la partida de gasto farmacéutico, los compromisos que la Generalitat arrastra desde el año pasado se elevan a 37.000 millones de pesetas, que dejaron de contabilizarse en las cuentas de la Generalitat durante el último trimestre de 1998.

Moreno explicó a Europa Press que el acuerdo del pleno del Consell "fue la primera medida importante" adoptada "después del discurso de investidura". Y recordó que supone desviar fondos previstos para la construcción de centros educativos, de salud o carreteras para destinarlos a cubrir gastos de funcionamiento y nóminas de personal. El portavoz socialista considera que el acuerdo del Consell demuestra que el presupuesto elaborado por la Generalitat para el año 1999 tenía un carácter "demagógico" y que fue hinchado artificialmente para aplacar diversas reivindicaciones municipales en un año electoral.

Esquerra Unida, por su parte, requiere al presidente que explique los problemas que han rodeado el inicio de curso no universitario. Los conciertos aprobados por la Consejería de Educación con una serie de centros educativos de élite a finales de agosto, fuera del plazo de matrícula, son parte sustancial de la interpelación.

Joan Ribó, portavoz de EU, explicó a Europa Press que la enseñanza no universitaria atraviesa una estapa "complicada y muy negativa" y denunció que se están desviando hacia la educación concertada "gran cantidad de recursos y en unas condiciones que no son las razonables", en alusión a la subveción concedida a un colegio perseguido por el Ministerio de Trabajo por fraude a la Seguridad Social.

EU pretende contraponer "la mala situación de la enseñanza pública y la maravillosa situación de la enseñanza concertada privada". Ribó destacó que en la esfera educativa coexisten "un modelo mimado" -en alusión a los colegios privados-, y un sistema público que el Consell que preside Zaplana maltrata para que vaya "languideciendo" con la intención última de "privatizar" sus actuales prestaciones.

Ribó considera que el PP persigue "una enseñanza de calidad en la escuela privada y subvencionada para aquel que lo pueda pagar y tenga unas convicciones religiosas profundas", frente a un sistema público bajo mínimos que atienda la demanda insolvente.

Alejandro Font de Mora, portavoz del PP, ofrecerá un respiro al presidente y le pedirá que traslade al pleno de las Cortes la situación de las negociaciones desarrolladas hasta la fecha sobre el AVE entre Madrid y Valencia.

Zaplana mantiene un acuerdo con José Bono, presidente socialista de Castilla-La Mancha, por el que se ha comprometido a evitar cualquier debate sobre el futuro trazado del tren de alta velocidad. Pero podrá garantizar que la futura infraestructura está políticamente despejada, que su financiación correrá a cargo del Estado y que el tren discurrirá sobre vías de ancho europeo.