La Confederación del Tajo paraliza las obras del trasvase para la sierra

Las obras de construcción del trasvase que llevará el agua desde embalse de Santillana a la sierra oeste de Madrid han sido interrumpidas por la Confederación Hidrográfica del Tajo. Esta decisión no es ajena a la denuncia de Ecologistas en Acción ante la Consejería de Medio Ambiente de que más de un centenar de encinas y fresnos del Parque Regional de la Cuenca Alta del Guadarrama había caído bajo el peso de las excavadoras de la Confederación, entidad responsable de la obra.El trasvase, según los ecologistas, se alejó del proyecto aprobado hace dos años por la junta del parque, se adentró por una zona forestal protegida y acabó con centenares de árboles. La Consejería de Medio Ambiente, tras recibir la denuncia, investigó los hechos. Y, según el presidente de la Confederación del Tajo, José Antonio Llanos, las dudas que le han surgido a la Comunidad sobre la existencia de todos los permisos necesarios para llevar a cabo los trabajos han llevado a la propia Confederación a paralizar el trasvase.

Llanos afirma: "Hemos parado mientras discutimos con Medio Ambiente si necesitan algún dato más". El presidente de la Confederación recordó que este trasvase está siendo construido para llevar el agua del Canal de Isabel II a la zona oeste de la región. "Buena parte de los municipios de esa zona, o bien se abastecen con el agua del pantano de la Aceña o bien reciben agua del Canal a través de viejas conducciones. Esto hace que, en verano sobre todo, tengan problemas con el abastecimiento. Por ello, la construcción de la tubería es fundamental para paliar estas carencias".

Las obras del trasvase de Casrama fueron aprobadas por el Consejo de Ministros en octubre del año pasado. Cuentan con un presupuesto de 3.718 millones. El proyecto consiste en la construcción de una estación de bombeo junto al embalse de Santillana, el acondicionamiento de las tuberías existentes del Canal de Isabel II hasta la estación de bombeo citada y la construcción de una gran tubería, de más de un metro de diámetro, desde Manzanares el Real a Villalba, y desde allí, un ramal hasta Valdemorillo.

Las obras incluyen, además, la construcción de un depósito de 35.000 metros cúbicos, así como las medidas necesarias para corregir el impacto ambiental que la gigantesca tubería de abastecimiento causará a su paso por el parque regional.

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