La Fiscalía y los jueces de Málaga impedirán que Pilar Ramírez juzgue a Gil

La Fiscalía y los magistrados de la Audiencia Provincial de Málaga preparan medidas para evitar que la juez Pilar Ramírez, suspendida de sus funciones cautelarmente por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), pueda juzgar asuntos en los que esté implicado el alcalde de Marbella, Jesús Gil. Ramírez obtendrá una plaza de magistrada en la Sala Segunda de la Audiencia de Málaga, que tiene competencias para juzgar casos ocurridos en Marbella.

La juez Ramírez fue hasta el pasado julio decana de los juzgados de Marbella y titular del de instrucción número tres, pero fue recusada por el fiscal jefe Anticorrupción, Carlos Jiménez Villarejo, por entender que existían motivos de incompatibilidad por los negocios y las relaciones de su familia con el alcalde de la ciudad, Jesús Gil, y con grupos mafiosos.La inspección del CGPJ abrió un expediente disciplinario a Ramírez por dos faltas muy graves y la suspendió cautelarmente de sus funciones en tanto se resuelve. Las faltas se refieren a la intervención de la juez en la instrucción de casos en los que estaban implicados miembros de su familia y a ejercer como juez en una ciudad de menos de 100.000 habitantes en la que su hermano trabaja como abogado.

Fuentes judiciales de Málaga calificaron ayer de "disparate" que la juez Ramírez haya obtenido una plaza de magistrada en la Sala Segunda de la Audiencia de Málaga, en la que recaen los asuntos penales de Marbella, cuando se encuentra suspendida de funciones. El CGPJ aún no ha ratificado el nombramiento de Ramírez en su nueva función, aunque al tratarse de la candidata con más antigüedad tiene automáticamente el derecho a ocupar la vacante existente en la Sala Segunda.

Ahora se da la paradoja de que Ramírez, en su nuevo destino, podría ser miembro del tribunal que juzgue el caso del presunto desvío de dinero del Ayuntamiento de Marbella al Atlético de Madrid, en el que está acusado el alcalde de la ciudad malagueña y presidente del club de fútbol, Jesús Gil y Gil, y otra docena de personas.

El juicio del caso Atlético se celebrará en la Sala Segunda de la Audiencia de Málaga a partir del próximo 20 de marzo. Esta instancia es la que tiene hasta ahora la exclusiva para juzgar los asuntos penales instruidos en Marbella. El presidente de la Audiencia Provincial de Málaga, Manuel Torres Vela, anunció ayer que propondrá en el pleno de magistrados que se celebra mañana una modificación en las normas de reparto de este organismo para que la Sala Segunda deje de ser la única competente para sentenciar los asuntos penales ocurridos en Marbella.

Recusación

Fuentes de la Audiencia confirmaron que la suspensión cautelar por seis meses de la juez no le impedirá tomar posesión de su nuevo cargo cuando sea ratificada por el CGPJ, y que incluso puede pedir el levantamiento de la medida. Las mismas fuentes precisaron que, como magistrada de la sala, Ramírez sólo quedaría impedida para juzgar aquellos casos en cuya instrucción hubiera participado y sí podría por tanto, salvo renuncia o recusación, sentenciar el caso Atlético.La juez puede pedir de forma voluntaria no formar parte del tribunal que juzgue el caso Atlético. La Fiscalía ya anunció ayer que recusará a Ramírez si finalmente forma parte de este tribunal. También tomará esta medida la acusación particular, que ejerce el PSOE. El abogado que la representa, José Carlos Aguilera, fue ayer contundente: "De ninguna manera Pilar Ramírez estará en un tribunal que juzgue a Jesús Gil, ni en el caso Atlético, ni en ningún otro".

Fue precisamente durante la instrucción de este caso cuando la Fiscalía Anticorrupción recusó a la entonces juez decana de Marbella. Ramírez dictaminó que el caso no había sido repartido en turno y no debía ser por tanto instruido por el juez Santiago Torres, titular del juzgado de instrucción número 7.

El padre de la juez y ex oficial de los juzgados, Juan Ramírez, aseguró ayer que su hija había solicitado el traslado de Marbella hace dos años y que se lo negaron "por razones de antigüedad".

En declaraciones a Efe, Juan Ramírez apeló al derecho de su hija a ocupar la plaza en la Audiencia de Málaga y a mejorar profesionalmente, aunque se mostró cauto sobre la decisión final que adopte la comisión permanente del CGPJ. "Obtendrá la plaza sólo si se lo merece", dijo.