Odón Elorza firma a hurtadillas el pacto con los populares para evitar su escenificación pública

El alcalde de San Sebastián, el socialista Odón Elorza, ha logrado su propósito. El pacto de gobierno entre el PSE-EE y el PP se formalizó ayer en la intimidad. El regidor donostiarra retrasó unos minutos el acto de la firma del acuerdo para que ésta se produjera sin la presencia de periodistas durante la celebración de la comisión de gobierno, a la que asistieron como "invitados" los concejales del PP y tuvieron el acceso prohibido los medios gráficos. Socialistas y populares presentarán esta semana el programa de gobierno convenido para este cuatrienio.

El Ayuntamiento de San Sebastián será gobernado en coalición por el PSE y el PP, y se convertirá en el única capital española regida por un bipartito de estas características. El acuerdo entre los firmantes existía desde hace casi un mes, aunque cuestiones de orden protocolario han ido retardando su cristalización.La firma del pacto PSE-PP en el consistorio donostiarra se celebró en secreto, en la intimidad de la comisión de gobierno y sin la presencia de los medios de comunicación, que no tienen permitido el acceso a la reunión semanal del ejecutivo municipal. La firma "es firme", declaró luego Elorza, quien esperó hasta el final de la comisión de gobierno para entregar al PP el decreto de nombramientos de sus nuevos delegados, que delimita el reparto de las 14 concejalías (ocho para el PSE y seis para sus nuevos socios), y da carta de naturaleza al pacto.

Un mero trámite, un matiz burocrático, impidió ayer a los ediles populares participar como miembros de pleno derecho en la comisión de gobierno. Asistieron a la reunión semanal de ésta en calidad de "invitados" por expreso deseo de Elorza, quien decidió unilateralmente retrasar unos minutos la firma del citado decreto.

Antes de comenzar esta reunión, el edil socialista Ramón Etxezarreta adujo "razones técnicas más que políticas" para justificar la tardanza, pero no enjuició los motivos por los que la puesta en escena del acuerdo se realizó premeditadamente a escondidas.

El alcalde guardaba en su poder el citado decreto desde el martes de la semana pasada, pero ha prolongado su entrega al Partido Popular hasta ayer por motivos que todavía no ha explicado públicamente, aunque a nadie se le escapa su deseo de eludir la escenificación pública del pacto.

El bipartito PSE-PP, indicó el alcalde donostiarra, es el fruto de "dos meses de contactos" entre ambas formaciones, que ya han definido por escrito las "normas de funcionamiento del pacto" así como el contenido del programa de gobierno, cuya presentación pública se realizará a lo largo de esta misma semana.

Mano tendida al PNV-EA

Elorza mostró abiertamente su satisfacción tras cristalizar la entente entre socialistas y populares, y citó como motivo fundamental el hecho de que "ningún otro Ayuntamiento de nuestro entorno tiene garantizada todavía la mayoría absoluta como sucede en San Sebastián". Sin explicar los motivos por los que ha preparado en secreto la firma del pacto, añadió que "ha merecido la pena", y se felicitó por el "valor" que ofrece el documento con las líneas de gobierno, cuyas líneas maestras, aseguró, "ofrecen muy pocos flancos para la crítica"

El regidor donostiarra sorprendió cuando, a renglón seguido, ofreció su colaboración -por enésima vez- a la coalición PNV-Eusko Alkartasuna. Su invitación a la oposición consiste en cooperar con el equipo de gobierno "en las grandes decisiones que afectan a la ciudad", como la política de compra de suelo y la construcción de obras importantes. Elorza apostilló que los nacionalistas moderados no participan en el gobierno municipal por "expreso mandato de [Xabier] Arzalluz y [Joseba] Egibar".

La edil del PP María José Usandizaga, por su parte, expresó la "felicidad" que embarga a su formación política por "hacer realidad un pacto "sin complejos y con toda dignidad", que está "por encima de los intereses partidistas y es en beneficio de todos los donostiarras". Usandizaga negó las acusaciones nacionalistas de que la nueva alianza represente un frente, porque "los demás se han autoexcluido" de las tareas de gobierno. Además de conceder mucha importancia a la "estabilidad" que se logra en San Sebastián, resaltó la "experiencia" que posee el PP en las labores de gobierno y en la gestión municipal.

Desde Euskal Herritarrok (EH), la concejal Miren Zinkunegi acusó a socialistas y populares de llevar adelante un "proyecto españolista" y de realizar "un mayor giro hacia la derecha, como queda claro en el reparto de las concejalías".

Mientras, el presidente de los populares vascos, Carlos Iturgaiz, afirmó ayer que el pacto de San Sebastián es el anticipo de otros similares que se sustanciarán en varios municipios importantes del País Vasco. En declaraciones a Radio Euskadi, Iturgaiz confirmó que las conversaciones entre el PSE-EE y su partido "van muy adelantadas" en localidades de la Margen Izquierda, como Sestao, Santurtzi, Portugalete u Ortuella, así como en municipios guipuzcoanos como Irún, Éibar o Rentería.