Los padres de alumnos recurren al Defensor del Pueblo para lograr la jornada intensiva en Alcalá

Los padres de alumnos de Alcalá de Henares buscaron ayer la ayuda del Defensor del Pueblo para implantar la jornada continuada en la mayoría de los colegios públicos de la localidad. La Comunidad, que gestiona la enseñanza no universitaria desde junio, les ha negado esa posibilidad. Los padres creen injusta la decisión y han escrito al Defensor del Pueblo para quejarse por el trato discriminatorio, pues en otros colegios de Alcalá sí tienen la jornada intensiva por autorización ministerial. Los padres se volvieron a manifestar ayer; sus hijos, por tercer día consecutivo, no acudieron al colegio.

Las protestas continuaron ayer en Alcalá y Torrejón. Las aulas de los 25 colegios complutenses que piden la jornada continua volvieron a quedarse ayer, por tercer día consecutivo, semivacías. La manifestación matutina fue apoyada por 2.000 personas. Los alrededor de 10.000 niños alcalaínos que han faltado estos días volverán mañana a clase, pero sólo por la mañana. En Torrejón, 800 personas se concentraron ante el Ayuntamiento para protestar por la no concesión de la jornada intensiva a los 14 colegios que la solicitan.La Federación de Asociaciones de Padres de Alcalá ha acordado enviar una carta al consejero de Educación, Gustavo Villapalos, y otra al Defensor del Pueblo. Ambas se centran en lo que ellos consideran una discriminación: que a ocho colegios complutenses se les haya concedido la jornada continua (la Comunidad argumenta que se debe a que son prórrogas de la autorización dada por el Ministerio de Educación el curso pasado) y al resto no, cumpliendo los mismos requisitos, entre los que se encuentran que el 80% de los padres del centro estén a favor.

"Nos sentimos profundamente agradecidos por la sensibilidad que demuestra el responsable educativo respecto a la salud y el rendimiento de nuestros hijos, pero nos inquieta sobremanera que la misma persona no muestre la misma sensibilidad con los niños de los ocho colegios que soportarán la jornada continua durante este curso", se lee en la carta de la federación al Defensor del Pueblo.

Fuera de nuestras fronteras, en la Unión Europea, tampoco hay unanimidad. Según datos facilitados por la Comunidad de Madrid, son mayoría los países que tienen jornada partida: Bélgica, Finlandia, Holanda, Francia, Italia, Luxemburgo, Reino Unido y Suecia. Los que tienen jornada continua son Alemania, Austria, Dinamarca y Grecia, pero en el último caso se debe a que no hay suficientes colegios y los que hay hacen dos turnos.

Experiencia en los centros

Este periódico visitó ayer dos de los ocho centros alcalaínos que tienen jornada continua, situados en barrios con distinta composición social : el Cardenal Cisneros, en el casco histórico, y el Beatriz Galindo, ubicado en un barrio obrero. Y uno que la tuvo el año pasado y este no, el Antonio de Nebrija.Sobre el rendimiento escolar no se han hecho públicos datos concluyentes. La Comunidad no dice si el rendimiento ha mejorado o no en los 34 colegios que tuvieron jornada intensiva el curso pasado. El Gobierno regional asegura que necesita más tiempo para estudiarlo. Las asociaciones de padres de tres colegios alcalaínos que tienen esta jornada, con los que ayer habló este periódico, afirman que el rendimiento ha mejorado o que los informes de la inspección fueron favorables, pero no aportan datos.

El colegio Antonio de Nebrija es uno de los que tuvo jornada continua el curso pasado, aunque sólo de enero a junio y por unas obras. Como los demás, no ofreció datos claros sobre el rendimiento de sus alumnos, pero fuentes de su consejo escolar aportaron uno que puede servir de aproximación, el porcentaje de alumnos con calificación global positiva en todas las áreas al finalizar la escolaridad. Durante el curso 98-99 fue del 64%, mientras que el curso anterior fue del 48%. La misma fuente halló la media de los ocho últimos cursos: el 62%.

El 93,3 % de los padres de este centro votaron a favor de la jornada continua en una encuesta de marzo pasado, cuando ya llevaban dos meses probándola. El claustro de profesores valoró la experiencia y añadió como argumentos a favor: "Se reduce el número de viajes casa-escuela. Se mantiene el servicio de comedor. Más tiempo libre durante la tarde para otras actividades extraescolares. Se evita la precipitación de la comida de los alumnos de educación infantil".

Sobre los problemas o ventajas de que los niños tengan toda la tarde libre, las asociaciones de padres afirman que es un problema inexistente en los colegios que tienen comedor. Es el caso del Beatriz Galindo (800 alumnos, de los que 176 utilizaron el comedor el curso pasado).

El colegio Cardenal Cisneros es uno de los que tiene jornada continua por segundo curso consecutivo, a pesar de que carece de comedor. Fue uno de los primeros en pedirla, en 1990, tras probarla a la fuerza por unas obras. La asociación de padres está muy satisfecha con el resultado.