_
_
_
_
ALARMA NUCLEAR

El mundo ha registrado 60 incidentes del mismo tipo desde los años cuarenta

Las medidas de seguridad actuales convierten el suceso de Japón en extremadamente raro

El Instituto francés de Seguridad Nuclear aseguró ayer que, desde los años cuarenta, ha habido en el mundo 60 accidentes "de criticidad" como el registrado ayer en Japón, aunque menos graves. De ellos, 33 ocurrieron en Estados Unidos y 19 en la antigua Unión Soviética. En Japón no había ocurrido nunca. Las actuales medidas de seguridad en las plantas de enriquecimiento de uranio, y la facilidad de su aplicación -en realidad, basta con no acumular cantidades de uranio que superen una cierta masa- convierten estos incidentes en extremadamente raros, según los expertos. En España, los bajos grados de enriquecimiento del uranio hacen prácticamente imposible un suceso de esas características.

Más información
Los ecologistas cuestionan la seguridad de la energía nuclear

Las centrales nucleares utilizan uranio enriquecido en diversos grados según el tipo de central. El uranio es primero extraído como mineral, y concentrado en forma de yellow cake o uranato con un 75% de contenido de uranio, en su mayor parte uranio 238 (el isótopo o variante más abundante y menos útil como combustible nuclear). Este concentrado se refina hasta obtener una pureza del 99% y se transforma en hexafluoruro de uranio.Los procesos posteriores tienen por objetivo enriquecer el preparado en la variante útil como combustible (el isótopo 235), que está presente en muy poca proporción en el uranio natural. Con ese material enriquecido se fabrican las barras de combustible que se utilizan en las centrales nucleares y que consisten generalmente en pastillas de óxido de uranio enriquecido apiladas y sujetas por varillas.

Con estas barras (en grupos de entre 100 y 234) se forman los elementos combustibles, que son los que componen el núcleo del reactor nuclear. Los elementos combustibles se introducen en una piscina y se van sacando hasta que se obtiene la masa necesaria para mantener la reacción en cadena de fisión nuclear, que produce el calor del que se extrae finalmente la energía en forma de electricidad.

Esta reacción es la misma, en esencia, que parece haberse producido en la planta de fabricación de combustible de Tokaimura, al superar la masa crítica el uranio líquido que estaban manejando los trabajadores.

En las condiciones actuales de seguridad, un accidente de criticidad como éste es un suceso rarísimo. Las fábricas de combustible nuclear disponen ahora de todos los medios para que esto resulte prácticamente imposible, explicó ayer un portavoz de la Empresa Nacional del Uranio (ENUSA), que fabrica combustible nuclear para las centrales españolas.

Sin embargo, el Instituto francés de Seguridad Nuclear aseguró ayer que, desde el final de la Segunda Guerra Mundial, ha habido en el mundo 60 accidentes de esas características. Estos incidentes fueron menos graves que el de Japón, y su trascendencia pública fue escasa.

El riesgo de que se produzca un accidente de esta clase también depende mucho del grado de enriquecimiento del uranio, es decir, del tipo de combustible de que se trate. En España el enriquecimiento es pequeño, menor del 5%. Los técnicos estudian la posibilidad de que se produzca un incidente, pero lo ven como sumamente improbable.

El que se alcance la masa crítica, por otra parte, depende de muchos factores sobre los que todavía no se ha proporcionado información, como el citado grado de enriquecimiento del uranio, su estado físico y químico, y si existen o no elementos moderadores o absorbentes de neutrones que propicien la reacción o, por el contrario, la dificulten.

En el caso de que se produzca un incidente de criticidad en una instalación de fabricación de combustible nuclear, lo más probable es que dure muy poco. La mayoría de estas reacciones no duran más allá de unos segundos. La reacción, no obstante, estaría acompañada de un alto nivel de radiación, como se ha observado en el accidente de Japón.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_