CENSURA DE "LA MEMORIA HISTÓRICA"

El alcalde de Salamanca, Julián Lanzarote, ha demostrado que guillotinar páginas de libros y meter la tijera a imágenes de vídeo se le da tan bien como sembrar de granito las calles de la ciudad, venga o no a cuento. Ahora, el Ayuntamiento ha editado un vídeo institucional, pagado con dinero de las arcas municipales, en el que se recoge el acto de la toma de posesión como alcalde de Lanzarote. El acto íntegro..., menos el discurso del jefe del grupo de la oposición, el socialista Aquiles Magide. De los 50 minutos de duración del vídeo, el alcalde ocupa más de 20 con su intervención, y no faltan las felicitaciones, los abrazos, los besos, incluso la ternura familiar recreada en imágenes con la mujer y los hijos del alcalde. Pero de los ocho folios que leyó el representante de la oposición socialista aparecen 34 segundos para felicitar al nuevo alcalde y saludar a los miembros de la corporación. Ante ello, el portavoz socialista, Fernando Pablos, ha aludido a la "inmoralidad" que representa "el afán censor que pretende borrar de la memoria histórica la intervención del grupo socialista", y ha recordado cómo hace cuatro años ya Lanzarote ordenó guillotinar el prólogo del libro La Cueva de Salamanca, de Luciano G. Egido, que se lo había solicitado al anterior alcalde socialista, Jesús Málaga. "Quien dio la orden está sobrando en la política salmantina", ha señalado Fernando Pablos, que también ha aludido al afán de anular a la oposición reflejada por el concejal popular David Prieto cuando hace tres días afirmó que no se había convocado a los socialistas a una reunión sobre empleo "porque ya estaban representados por los funcionarios del Ayuntamiento".-