El procesado pide permiso para querellarse contra Garzón por calumnias y falsedad

Las graves acusaciones contenidas en el testimonio de Garzón obligaron a Liaño a reaccionar. El propio juez procesado solicitó al tribunal autorización para poder querellarse contra Garzón por calumnias y falso testimonio. La autorización es preceptiva al tratarse de manifestaciones realizadas en el curso de un juicio: "Nadie podrá deducir acción de calumnia o injuria vertidas en juicio sin previa licencia del juez o tribunal que de él conociere o hubiere conocido", según dispone el artículo 215 del Código Penal. El tribunal se pronunciará el próximo lunes.La fiscal Márquez de Prado, defensora y esposa de Gómez de Liaño, declaró que "ante las gravísimas manifestaciones del señor Garzón, y para refutar su testimonio", era necesario llamar a algunos testigos que ya habían declarado en el juicio, como el fiscal Ignacio Gordillo y algunos nuevos, como Jaime Campmany (denunciante de Sogecable y familiar político de Gómez de Liaño), el catedrático Jesús Neira, el abogado Antonio García Trevijano, el juez Joaquín Navarro Estevan e incluso ella misma.

El presidente del tribunal le indicó que formulase su petición por escrito y que la Sala resolvería lo procedente.

La petición fue presentada por escrito, pero el tribunal anunció que será el lunes por la mañana cuando tome una decisión al respecto.

Durante uno de los descansos de la sesión de la tarde se apreció que el juez Gómez de Liaño se encontraba indispuesto, al parecer debido a una bajada de tensión. El magistrado fue reconocido por el médico forense y, tras una hora de interrupción, se reanudó la vista oral una vez que el acusado, ya restablecido, pudo regresar y ocupar su lugar en el banquillo.