Aberchan propone disolver la Asamblea y convocar nuevas elecciones en Melilla

El presidente de Melilla, Mustafa Aberchan (Coalición por Melilla), aseguró ayer que la disolución de la Asamblea local y la convocatoria de elecciones anticipadas sería la "solución al problema" político de la ciudad autónoma, gobernada en solitario por CPM, que tiene sólo cinco de los 25 diputados. Aberchan lanzó esta propuesta coincidiendo con la celebración de un pleno extraordinario de la Asamblea en el que todos los grupos, salvo los dos diputados socialistas, reclamaron de nuevo su dimisión.

La convocatoria de unas elecciones anticipadas para desatascar el conflicto melillense requeriría la autorización del Gobierno central, ya que la Asamblea local carece de competencias para disolverse sin cumplir la legislatura, que comenzó el pasado 3 de julio con la investidura de Aberchan. El propio presidente se mostró escéptico respecto a que su propuesta "sea viable o recomendable". Aunque matizó a continuación: "Si pudiésemos escuchar la voz del pueblo de forma automática sería la solución a este problema, aunque algunos temerán que se pronuncie". En su opinión, "siempre es importante escuchar la voz del pueblo, que es soberana y se debe respetar".Aberchan dijo a los periodistas que la petición de disolución de la Asamblea no es la medida "sorpresa" que hace unos días se comprometió a revelar. La sorpresa "no sorprenderá" al pueblo de Melilla, "que es más inteligente que algunos representantes de la oposición, pero sí a la sustancia gris de algunos de sus diputados". El presidente de Melilla insistió en que no hará pública su oferta hasta finales de la semana próxima.

Otra de las opciones sería presentar una moción de censura, pero hasta ahora no se ha conseguido reunir las 13 firmas que requiere para prosperar, ya que el PSOE se negó a apoyar la que habían acordado el PP, UPM y PIM. Aberchan recordó que, como presidente de la ciudad autónoma, está "obligado" a proponer diversas fórmulas para conseguir la mayoría absoluta que dé estabilidad a su mandato y pidió a la oposición que actúe con "responsabilidad" y negocie "sin condicionantes" como la exigencia de su dimisión, planteada por el GIL, PP, UPM y PIM. Lamentó que estas formaciones "pretendan dar lecciones de democracia" y subrayó que su voluntad de acometer una solución política sin esperar a que resuelva el Tribunal Supremo "no tiene precedentes en la historia reciente de esta Asamblea" ya que sus antecesores "sólo actuaron cuando les obligó un fallo judicial". Aberchan afirmó que los dirigentes de partidos "como el PP" manifiestan "cosas distintas" en el despacho de Presidencia y ante la opinión pública, "porque mientras dicen a la prensa que no participarán en el Gobierno, en las entrevistas que hemos mantenido me han pedido áreas de poder".

Las declaraciones de Aberchan siguieron al pleno extraordinario de la Asamblea de Melilla que aprobó la constitución de las comisiones informativas con los votos favorables del equipo de gobierno (CPM) y los grupos de la oposición (PP, UPM, PIM y PSOE), y la abstención de los siete diputados del GIL, que sí aceptaron participar en las comisiones. Este grupo considera que "la Cámara está inmersa en una flagrante ilegalidad por la presencia en ella del socialista Rafael Hernández", sustituto de la dimisionaria Malika Mohamed.

El portavoz del GIL, José María Benítez Melul, advirtió que Aberchan "está yendo en contra de sus propios actos" al no llamar a pleno a la exsocialista Mohamed, a la que el presidente mantuvo inicialmente en su escaño por decreto, y que, según el GIL, "sigue siendo diputada porque su renuncia no se ha conocido en Pleno". Según Benítez Melul, la presencia de Hernández no sólo "atenta contra el derecho fundamental de Mohamed como diputada", sino que "vulnera la legalidad y validez de los actos que emanen de la Asamblea".

El pasado jueves la Sala de Vacaciones del Tribunal Supremo rechazó la suspensión urgente del acuerdo de la Junta Electoral Central que confirmó el acta de diputado al socialista Hernández en sustitución de Mohamed, que renunció al cargo tras apoyar la investidura de Aberchan en contra de las directrices del partido. Luego dio marcha atrás y quiso enrolarse en el grupo mixto.