De Palacio recibe un rechazo unánime a su propuesta de crear nuevas tasas de circulación

La ex ministra de Agricultura y nueva comisaria europea, Loyola de Palacio, recibió ayer el rechazo unánime de los partidos de oposición y de las asociaciones de consumidores y de automovilistas a la idea de crear un nuevo impuesto o tasa sobre los automóviles por utilizar las autovías europeas. Hasta la fecha, el pago de tasas por utilizar infraestructuras sólo afecta a los sectores aéreo, marítimo, ferroviario y de transporte por carretera. PSOE, IU y diferentes asociaciones de usuarios y de automovilistas calificaron de "descabellada" la propuesta.

Los planes de la futura comisaria europea de Transportes de la Unión Europea, según informó ayer La Vanguardia, están contenidos en las respuestas escritas enviadas al Parlamento Europeo por la aspirante Loyola de Palacio, quien tomará posesión de su nuevo cargo en la Comisión Europea a mediados del mes de septiembre.Sin embargo, a última hora de ayer, el jefe de gabinete de la ex ministra, Daniel Calleja, trató de suavizar la polémica y señaló que aunque De Palacio reconoce que no sería descartable pensar en la imposición de nuevas tasas, la ex ministra no ha realizado "ninguna propuesta en ese sentido" y sí, por el contrario, ha excluido la implantación de una tarifa obligatoria y unitaria a nivel europeo.

En esencia, la ex ministra de Agricultura propone incluir los automóviles privados en lo que denomina "principios de tarificación equitativa y eficaz" para la financiación de las infraestructuras del transporte. O lo que es lo mismo, crear una nueva tasa que serviría, teóricamente, para animar al sector privado a participar en la construcción de las grandes infraestructuras del transporte y para promover sistemas menos contaminantes. De Palacio va más allá y defiende incluso el fomento de tarifas por el uso de vías urbanas.

La teoría de "pagar por usar" que propone De Palacio no ha gustado nada a los partidos de oposición ni a las grandes organizaciones de consumidores y de automovilistas, que han calificado la idea con una amplia gama de adjetivos resumidos en tres: la propuesta, aseguran, es "descabellada", "inaceptable" e "insolidaria".

Para el principal partido de la oposición, el PSOE, la propuesta es "inaceptable" porque, sólo en España, hay más de 2.500 kilómetros de autopistas de peaje, con lo que de llevarse a la práctica la idea de De Palacio, los automovilistas pagarían dos veces el uso de infraestructuras. Para el PSOE, la propuesta "es coherente con la política de la derecha española", que rebaja impuestos a los más favorecidos y castiga al resto de los ciudadanos.

De igual forma, IU aseguró que la propuesta trata de impulsar una "recaudación indiscriminada" justo cuando aumenta la presión para que se eliminen los peajes allí donde éstos existen.

Los transportistas agrupados en la federación Fenadismer, por su parte, expresaron su "radical oposición" a los planes de De Palacio y coincidieron en señalar que supondrían que los usuarios pagarían dos veces por el uso de infraestructuras.

Nuevo impuesto

En el mismo tono crítico se manifestaron las organizaciones de consumidores y usuarios OCU y UCE. Ambas calificaron la propuesta de la ex ministra de "pésima noticia" porque el nuevo impuesto, de implantarse, "afectaría lo mismo al que tiene 100 que al que tiene dos". La OCU, a través de su portavoz, José María Múgica, instó a los votantes a que cuando se celebren elecciones, se interesen por qué partido incluye en su programa la imposición del nuevo impuesto. Por parte de los automovilistas, el portavoz de Automovilistas Asociados Europeos (AEA), Mario Arnaldo, tildó los planes de De Palacio de "insolidarios".La futura comisaria sólo recibió ayer el apoyo, matizado, del Comisariado Europeo del Automóvil, al que las nuevas tasas no le desagradan siempre que se eliminen los peajes. El portavoz del Comisariado, Eugenio Dobrynine, señaló que no tiene sentido "una doble imposición".