Jatamí pide al clero de Irán tolerancia a otras ideas

El presidente de Irán, Mohamed Jatamí, ha hecho un lamamiento al clero iraní para que tolere el pluralismo y las divergencias de opinión como parte de su proyecto de construir una nueva "sociedad civil" en el país. "Las diferencias de opinión son necesarias para el desarrollo y la supervivencia de las ciencias islámicas", declaró Jatamí, según la agencia oficial de noticias Irna.Para el presidente iraní ha llegado el momento de demostrar la capacidad del islam de aceptar otros puntos de vista. "La Constitución ha otorgado derechos legales a personas cuyas posiciones son diferentes de las nuestras, lo que constituye una fuente de orgullo para el islam", subrayó Jatamí.

"No hay nada malo en que otras corrientes y tendencias tengan sus propias plataformas, periódicos y revistas para expresar sus opiniones", dijo el domingo ante los responsables de la Oficina de Propagación Islámica en una escuela de teología de la ciudad santa chií de Qom. La Oficina de Propaganda Islámica es un órgano conservador encargado de extender las ideas revolucionarias de la República Islámica.También está implicada en labores de investigación y envía clérigos por todo el país y al extranjero para proporcionar educación religiosa. Jatamí también pidió a la vieja guardia de las instituciones religiosas tradicionales que sea tolerante con las jóvenes generaciones de estudiantes. "Deberíamos dar la bienvenida a los pensamientos de las nuevas generaciones de las escuelas de teología. En una atmósfera abierta, todos los temas pueden ser discutidos", añadió.

Jatamí ha acelerado sus esfuerzos para justificar sus nuevas ideas para Irán tras las movilizaciones del mes pasado motivadas por el cierre del diario reformista Salam, que fueron usadas por los radicales como pretexto para entorpecer los cambios políticos y sociales en el país.

Desde su llegada al cargo hace dos años, Jatamí, elegido sobre la base de un programa de reformas que pretenden conseguir una sociedad civil más democrática y abierta a Occidente, libra una batalla continua contra las facciones conservadoras que controlan la mayoría de los centros de poder en Irán.