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Misión cumplida

El Mallorca empata en Noruega y cumple su objetivo de no perder ante el Molde

MOLDE FK 0 MALLORCA 0El Mallorca resistió bien el acoso del Molde FK noruego y se trajo un empate a cero goles que le convierte en gran favorito para acceder a la fase final de la Liga de Campeones. Pese a su evidente inferioridad en el aspecto físico -los noruegos ya han jugado 18 jornadas de Liga-, el equipo de Mario Gómez supo contrarrestar a su rival y acercarse en varias ocasiones con peligro hasta la meta defendida por Bakke.Los noruegos apenas rasean el balón e intentan trasladarlo todo lo rápido que pueden hasta la otra portería, finalizando las jugadas con centros muy ajustados. De esa forma le marcaron 4-0 al CSKA Moscú. No son un prodigio de técnica, pero tampoco desdeñan la jugada preciosista, como se comprobó con un par de tacones y filigranas empleadas por algunos de sus integrantes. Arriba, tienen al gigante Lund, capaz de aprovechar cualquier duda de su marcador.

Molde FK: Bakke; Strande, Fostervold, Lydersen (Dos Santos, m

46), Olsen; Foss, Hestad, Mork (Sungot, m.57), Fjortoft; Lund y Hoseth.Mallorca: Burgos; Olaizola, Siviero, Niño, Miquel Soler; Lauren, Engonga, Ibagaza (Serrizuela, m.83), Stankovic; Carlos (Bjokak, m.78) y Polo Quinteros (Gabrich, m.65). Árbitro: Mario van der Ende. Unos 8.000 espectadores en el Molden Stadium.

El Mallorca respondió como buenamente pudo. En la portería debutó el Mono Burgos y se mostró tan contundente como su antecesor, Carlos Roa. En la zaga, Niño ocupó el puesto que dejó Marcelino Elena y en el ataque, Carlos y Polo Quinteros tuvieron la difícil misión de hacer olvidar a Biagini -lesionado- y Dani García, ahora en el Barça. El resto del equipo estuvo integrado por los mismos hombres que empleaba Cúper. Sólo faltaban más partidos, como se comprobó en varias ocasiones, donde el Mallorca flaqueó más de la cuenta en el aspecto físico.

La defensa isleña, con Burgos en gran forma, fue un baluarte y por ello, los noruegos variaron su estrategia en la segunda parte. Se olvidaron de la presión y cedieron el centro del campo para facilitar los ataques visitantes, con un objetivo muy claro: descomponer el orden defensivo mallorquinista. No lo lograron, porque Burgos y sus compañeros de zaga estuvieron inconmensurable para firmar un 0-0 que deja al Mallorca con grandes posibilidades de asegurar su clasificación en la Liga de Campeones en el partido de vuelta que se disputará el día 23 en Son Moix.

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