El árbitro colabora a la tercera derrota consecutiva del Barcelona

BARCELONA 2 BOCA JUNIORS 3El Barça no pudo con el Boca Juniors en un partido vistoso, alegre, sólo alterado por la actuación del árbitro, una calamidad, pues se equivocó al conceder los dos primeros goles de los argentinos. El equipo de Carlos Bianchi, en cualquier caso, refrendó en el marcador su categoría y peso futbolístico frente a un equipo azulgrana que sumó su tercera derrota consecutiva, pese a que resultó menos dolorosa que las dos anteriores.Van Gaal planteó la jornada de trabajo de ayer como una más depretemporada. Entrenamiento por la mañana en el Camp Nou, viaje al mediodía a Alicante y amistoso por la noche. Sólo una diferencia. No viajaron los lesionados Guardiola, Abelardo y Xavi. Tampoco lo hicieron por precaución Reiziger, Sergi y Luis Enrique. Y Rivaldo, recién llegado de las vacaciones, se quedó en Barcelona. El técnico sentó en el banquillo de los suplentes a Kluivert, Hesp, Litmanen, Zenden, Figo y al transferible Roger.

El Barça se plantó ante el Boca sin sus principales efectivos. Siguió el guión táctico escrito en la libreta, pero el Barça jugó sin sus laterales naturales y fueron Déhu y Bogarde los encargados se defender las bandas. Ronald de Boer ejerció de conductor de grupo, con los escuderos Mario y Gabri, además de Cocu. Y un trio de ataque inédito: Simao, Dani y Nano. Se trataba de un ensayo, pero el Boca Juniors no concedió al encuentro un carácter amistoso.

El árbitro ayudó al grupo de Bianchi. Mejía Dávila concedió el primer gol sin que el balón hubiera entrado en el portal de Arnau y en el segundo no apreció las manos de Barros que facilitaron que la pelota alcanzara la red. La entrada en escena de Kluivert, Litmanen y Figo dio mayor consistencia al equipo azulgrana, que compitió con ganas. Sólo la actuación de Riquelme y el remate de Palermo, evitaron que el Barça le diera la vuelta al resultado. El empeño azulgrana fue tan meritorio como el juego argentino.