Caza de oportunidades

Las rebajas veraniegas llegaron a la Bolsa española demasiado pronto y con una brusquedad poco usual, pero algunos inversores han madrugado para aprovechar unos precios que, a su entender, puede que no se repitan, al menos en los próximos días. La caza de gangas fue ayer una actividad habitual en el mercado, aunque sólo participaran en ella los profesionales, y sin jugarse demasiado, ya que en este mercado no se admiten devoluciones.La contratación en el mercado continuo fue la cuarta más baja del año, con 77.833 millones de pesetas efectivas, 467,79 millones de euros, y con una concentración del 50% en sólo tres valores. Estos datos indican que el esfuerzo de los inversores es muy limitado y que busca la garantía de la liquidez. Ayer, la Bolsa de Madrid cerró con una ganancia del 1,86%.

La situación continúa ofreciendo algunos riesgos y los compradores han decidido concentrar su actividad en muy pocos valores, algo lógico cuando se puede obtener una buena representación del Ibex 35 con apenas 10 sociedades. La apuesta estaba clara en lo que se refiere al arbitraje, pero para el conjunto del mercado aún hay demasiadas dudas que despejar, entre ellas la del precio de la deuda, como para tentar a la suerte.

La rentabilidad de la deuda española a 10 años ascendió ayer hasta el 5,37%, aunque al cierre del mercado también se notó la asistencia a las rebajas, y el nivel mejoró hasta el 5,34%, el mismo del pasado viernes. El bund alemán rondaba el 5% a media sesión y el bono estadounidense también subía su rentabilidad hasta el 6,18% en algunos momentos, lo que se tradujo en un incremento de la inestabilidad en Nueva York. El Dow Jones perdió 6,30 puntos, un 0,06%, y se situó en 10.707,70 puntos.

Los observadores relacionaban la subida de la deuda española con la publicación el próximo viernes del IPC del mes de julio, para el que algunos pronósticos hablan del 0,5%. De ser así, la tasa interanual de inflación se situaría en el 2,3%.