"En Europa nos dan lecciones de integración y de emigración"
De Barbate (Cádiz), cosecha del 59: guitarra de crianza múltiple, tan viajada como la maleta de un trotamundos capaz de transitar por cualquier música con alma. Nono García, que cerró en Málaga el ciclo La Raíz en la Frontera con la Piñones Flamenco Jazz Band (Eva Durán, Pedro Martín y Efraim Toro), está a punto de sacar su segundo disco, tras el hermoso Las quimeras del momento. Ha sido guitarrista del grupo belga Vaya con Dios, y ha acompañado a Chano Domínguez, Carlos Cano, Martirio, Gema y Pavel, Javier Ruibal, Hijas del Sol, Luis Pastor y, ahora, a Azúcar Moreno. Pregunta. Su música habla del viaje. Respuesta. El viaje es metáfora y realidad. Somos de donde hemos estado. Yo he vivido en Cádiz, Granada, Málaga, Bruselas y Madrid. Tomé la decisión de buscar fuera, físicamente o con el pensamiento. P. Su guitarra suena única, con sonidos de todos los lugares. R. Me ha costado muchas fatigas, pero tengo mi guitarra llena de pegatinas invisibles de viajes. Siempre con un pie en el flamenco, en el jazz, en los cantautores... No sólo me interesa la música, sino lo que está alrededor, la gente. P. Ahora tiene un disco a punto. R. Casi terminado. Se titulará Atún y chocolate. Dos cosas diferentes, pero igual de ricas. Es como el yang y el yin viniendo de Barbate. P. ¿Y qué habrá dentro? R. Guitarra, contrabajo y muchas percusiones. Han colaborado Tomasito, Tino di Geraldo, Nanda El Chocolate de Singapur, Guillermo McGill o la cantaora Eva Durán. Habrá alegrías, una rumba mora, una salve marinera... P. ¿Qué sacó de su experiencia en Bélgica? R. Lo que me da rabia es que la gente hable mal de Bruselas. Nos llevan mucho adelanto en lo que tiene que ver con la integración y la emigración. En Europa nos dan lecciones. P. ¿Y musicalmente? R. Con Vaya con Dios tuve una experiencia personal y musical muy hermosa por toda Europa. Descubrí la disposición de los músicos y las ganas de aprender. El respeto hacia la música, que es una cosa que desgraciadamente falta en España. P. ¿Qué se encuentra al volver? R. Fui a Madrid. Y primero fue una playa, luego un puerto y ahora es un aeropuerto. Un sitio para trabajar, un tránsito obligado. P. ¿Y cómo está la Andalucía que dejó? R. ¿Nos metemos en política? Es lo que digo siempre: que vamos a entrar en el 2000 con la luz apagá y con la derecha en el poder. Pues a ver si contra la derecha conseguimos un mundo mejor, un mundo en el que creemos muchos.
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