Los socialistas de Málaga desean más poder en su partido y mayores inversiones en la provincia
"Somos la segunda agrupación de nuestra comunidad autónoma y eso debe tener un reflejo en el partido". El PSOE de Málaga reclama mayor protagonismo en la dirección socialista de Andalucía, en el documento que se debatirá en su congreso extraordinario del 6 de agosto. Y añade otra pretensión: que su participación en los órganos de decisión del PSOE andaluz "sea real, efectiva y equivalente a la importancia de nuestra militancia". Las reivindicaciones de los socialistas malagueños no terminan en su partido: "tenemos que seguir trabajando para que nuestras propuestas se incluyan en los programas de gobierno, en particular de la Junta". Este documento, de 30 folios, alude a un "proyecto solidario de Andalucía en el que nadie se sienta discriminado". El texto se debatirá desde hoy hasta el viernes en las asambleas de 116 agrupaciones de la provincia (en Ronda ya se celebró el pasado viernes). Uno de sus autores es José Asenjo, actual vicesecretario general del PSOE andaluz y único candidato a secretario provincial. El papel desempeñado por Asenjo en la ejecutiva regional, por acción o por omisión, no se corresponde con su puesto de teórico número dos de los socialistas andaluces. En uno de los puntos se crítican las desigualdades en la región: "En Andalucía se ha ido produciendo un fenómeno de acumulación de infraestructuras y de concentración de centros de poder y de decisión en unas ciudades más que en otras. Málaga no ha recibido una atención preferente." El PSOE de Málaga opina que este desequilibrio "fomenta el agravio comparativo y debilita el concepto de Comunidad". Y recuerda que Málaga "es la capital económica de Andalucía porque su sociedad es así de dinámica, pero no por una decisión política o económica de los poderes públicos manifestada en acciones determinadas". En los 28 puntos propuestos al congreso hay muchas otras consideraciones. Como una autocrítica por haber dejado de ser "referente de las políticas solidarias" y haber perdido "presencia en la sociedad". Los socialistas malagueños propugnan un partido que atienda prioritariamente a los desfavorecidos, pero que no se olvide "de ese gran estrato social que conforma el centro progresista". En dos momentos se descalifica, sin mencionarlo, a Jesús Gil: "Grupos independientes y sin ideología ofrecen respuestas prontas y aparentemente eficaces a determinados problemas".
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