Anguita es reelegido candidato a La Moncloa con un 30% de los votos en contra

Todo está ya decidido en Izquierda Unida. Julio Anguita continuará como secretario general y será el candidato a las próximas elecciones generales del 2000. Lo único que cambiará son algunos puestos de la comisión permanente, que pasará de 19 a 26 miembros para incluir a los representantes de las minorías. Así, Anguita da por cerrada la crisis surgida en IU tras el fracaso en las últimas elecciones del 13 de junio, aunque un 30% de los miembros del consejo, que representa a toda la organización, votó en contra de que sea el candidato a las próximas elecciones.

Julio Anguita fue elegido como candidato a las elecciones generales del 2000 por 96 votos a favor y 43 en contra, 5 abstenciones y 4 votos en blanco. Antes de la votación, hubo varias intervenciones críticas, que hablaron de un liderazgo "agotado". Pero en cuanto se hizo el recuento, y pese a tener un tercio de los votos en contra, Anguita subió al estrado para hacer un discurso en el que, con un tono casi amenazador, pidió a todos los dirigentes de Izquierda Unida allí presentes que le apoyen, den por cerrada la crisis, y no hagan resaltar las diferencias dentro de la coalición. Además, les pidió que le sigan activamente. "Cuando mire hacia atrás quiero veros a todos, no a estatuas de sal", les espetó.El líder de IU mostró su confianza en que después del respaldo que ha recibido en el Consejo Político podrá desarrollar su candidatura a la presidencia del Gobierno "sin concesiones a nadie" para preparar una campaña electoral en el que está dispuesto a "agotar" sus fuerzas.

Anguita adquirió un tono más de campaña electoral, minutos después de haber sido nombrado candidato, para hablar de las diferencias que le separan tanto del Partido Popular como del PSOE, aunque recordó que IU tiene "la mano tendida" hacia este último partido y que piensa ser un candidato "incómodo para el poder".

Con las decisiones que se han tomado dentro de este consejo político, y a pesar de haber tenido un tercio de los votos en contra de su candidatura, Anguita dio por concluida la crisis de Izquierda Unida, iniciada tras las últimas elecciones del 13 de junio.

En su discurso de la mañana, antes de saber el resultado de las votaciones, el líder de la coalición de izquierdas anunció que un apoyo al documento político preparado por el comité de notables para cambiar algunas líneas de la organización significaría "sellar la crisis".

Crisis de la sociedad

Este primer discurso lo aprovechó para, además de defender el documento, hacer un duro análisis de la realidad. En este momento volvió a hablar de crisis, pero no la de Izquierda Unida, sino la de la sociedad y el sistema, ejemplificada en sucesos como la violencia racista de Terrassa o la "frivolidad" de impulsar una reforma del Código Penal 24 horas después de que el Tribunal Constitucional declarara inconstitucional uno de sus artículos.

Anguita eludió hablar de la dimisión que amagó con presentar tras las elecciones del 13 de junio. Pero, dado el resultado de la votación, es de suponer que se da por olvidada.

Esos 48 votos que Anguita tuvo en contra se reflejaron también en las múltiples intervenciones para fijar la postura de cada uno de los miembros del consejo político. Los más críticos fueron los representantes tanto de la federación de Madrid como de las minorías Tercera Vía y Espacio Alternativo.

Ángel Pérez, líder de IU en Madrid, criticó a la dirección de la coalición porque cree que no está logrando que IU "termine de ubicarse", lo que permite que el PSOE siga ganando espacio. Jaime Pastor, de Espacio Alternativo, fue uno de los más críticos, sobre todo al analizar cómo se ha transmitido el discurso de IU desde 1995. Pastor criticó tanto la política de "las dos orillas", que él considera un error, como el hecho de que, en el discurso de IU sobre la guerra de Yugoslavia, no se haya "dejado claro" que la coalición "no tiene una doble moral sobre los derechos humanos".

Una de las intervenciones más emotivas fue la de Pedro Granados, actual responsable de Organización y Finanzas. Tras la reorganización de la dirección, es él, junto a Víctor Ríos, portavoz de IU, el único que realmente ha sido cesado, aunque seguirá en otro puesto de menor importancia. Granados criticó con dureza que el documento político hable de una "política de financiación clara", porque de ello se puede deducir que la anterior, de la que él era responsable, no era clara.

También Isabelo Herreros, de Izquierda Republicana, anunció que iba a votar en contra de la candidatura de Anguita porque la daba por "agotada".

Apoyo sin fisuras del PCE

Los que intervinieron para apoyar a Anguita sin fisuras fueron los representantes del PCE. Su secretario general, Francisco Frutos defendió a Anguita como el mejor candidato, y se mostró optimista sobre el futuro de IU al decir que, a partir del cierre de esta crisis, esta fuerza puede "salir a la ofensiva". En la misma línea se expresó Felipe Alcaraz, que defendió que en IU "no hay una crisis de proyecto", por lo que encuentra suficientes las reformas hechas hasta ahora.