La república rusa de Ingushetia legaliza la poligamia
Ruslán Aushev, presidente de Ingushetia, una república caucásica de la Federación Rusa, no siente por ahora la necesidad de tomar una segunda esposa. La suya le ha dado un hijo ("mi heredero") y dos hijas "maravillosas". Pero si no le cuida bien, dice medio en broma, se pensará iniciar un harén. Lo que, sin embargo, iba totalmente en serio era el decreto con el que poco antes había legalizado la poligamia, en aplicación de la ley islámica y con el objetivo de frenar la creciente despoblación. La sharía -ley islámica- impera ya en la vecina Chechenia, independiente de hecho, aunque no de derecho, de Moscú. El desafío a Rusia ha llegado a concretarse allí incluso en ejecuciones públicas, pese a que Borís Yeltsin dictó en septiembre de 1996 una moratoria sobre prohibición de la pena de muerte. Lo que nadie se esperaba era que el contagio islámico llegase tan rápido a una república que, hace menos de ocho años, se regía aún por las rígidas normas igualitarias del Estado soviético.
La respuesta de las autoridades centrales a un decreto que permite a los hombres tener hasta cuatro esposas (pero que no reconoce a las mujeres el derecho a la reciprocidad) ha sido inmediata.
El ministro ruso de Justicia, Pável Krasheninnikov, se ha apresurado a declarar que la medida es inconstitucional, pero eso no ha hecho que Aushev se vuelva atrás. El relajamiento del control de Moscú sobre los 89 territorios de la federación no garantiza, y menos en la explosiva región caucásica, que el poder central logre impedir la aplicación del decreto.
Por su parte, la máxima jerarquía musulmana de Rusia y de la Comunidad de Estados Independientes, el muftí Talgat Tadzhuddin, ha apoyado la medida, pero ha recordado la obligación de todo buen musulmán de atender con equidad a las necesidades de todas sus esposas. "Toma tantas mujeres como quieras", dijo citando al Corán, "una, dos, tres o cuatro, pero si temes que no vas a actuar justamente con ellas, toma sólo una".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.