La avalancha de argelinos colapsa los servicios del puerto de Alicante 5.000 usuarios del ferry de Orán, en lista de espera esta quincena

La gran afluencia de emigrantes argelinos con destino a Orán ha colapsado los servicios del puerto de Alicante en la primera quincena de la operación Paso del Estrecho. Durante estos primeros 15 días de julio, quizás animados por la nueva situación política en Argelia, más de 5.000 súbditos de ese país se han presentado en el puerto de Alicante sin billete de embarque previo. Ello ha obligado a la compañía naviera que explota la línea Alicante-Orán a fletar cuatro buques extra para atender el sorpresivo aumento de usuarios.

Ya en la cubierta del barco, y con la enseña argelina ondeando sobre sus cabezas, sus miradas se tornan más serenas. Son algo más de un millar de argelinos a punto de iniciar la última etapa de la tortuosa y, en algunos casos agónica, travesía para disfrutar de las vacaciones estivales en su país de origen. A sus espaldas han dejado miles de kilómetros por las carreteras francesas y españolas a bordo de sus vehículos atestados de enseres personales hasta llegar al puerto de Alicante para embarcar en el ferry que les conducirá hasta Orán. Antes de subir al buque han tenido que soportar, casi a la intemperie, una media de 24 horas en el recinto portuario habilitado especialmente para acogerlos, cuyos servicios se han visto desbordados ante el sorpresivo incremento de usuarios: un 17% más en la primera quincena de este mes, de los cuales cerca de 5.000 se presentaron sin billete de embarque. "Nos tratan como a perros", dice un padre de familia que declina identificarse. "Un cero para la Administración española y otro para el consulado argelino. Llevo cuatro días esperando embarcar y cada noche tengo que pagar un hotel para mí y mi familia", añade mientras intenta sin éxito en las ventanillas de la compañía naviera lograr un billete para embarcar en el ferry del día. "Ni servicios ni nada. Los aseos están sucios", espeta otro compañero. Estos dos emigrantes argelinos llegaron al puerto de Alicante sin billete de embarque previo. Pero no son una excepción. Desde que oficialmente comenzó la Operación Paso del Estrecho, cerca de 5.000 argelinos se han presentado en el puerto de la misma forma. Si los que llegan con billete tienen que esperar un día, estos últimos han de soportar varias jornadas de espera. Pero llegar sin pasaje tiene además una penalización económica, ya que si hubieran sacado el billete en Francia habrían tenido una bonificación del 40% (el billete de ida cuesta 16.600 pesetas por persona, y 58.000 por automóvil). La nueva situación política de Argelia es uno de los motivos que ha animado a los emigrantes argelinos, mayoritariamente radicados en Francia y Bélgica, a cruzar el Estrecho. "Es el primer año que vengo, pero no esperaba encontrarme con este atasco en el puerto", señaló un joven en esta situación. Para atender el incremento de usuarios en la lista de espera, la compañía ha fletado cuatro barcos extra. "En total, en estos primeros 15 días han embarcado 21.800 pasajeros y 4.100 coches", afirma Antonio Muñoz, gerente de la naviera que explota la línea. Muñoz discrepó de los argelinos y aseguró que el tiempo de espera, incluso para los que no tienen billete previo, nunca es superior a un día. "Ahora [viernes pasado, cuando acaba de zarpar el último ferry], no hay nadie en lista de espera", comentó. La afirmación del gerente no era gratuita. El paisaje en esta zona del puerto había cambiado radicalmente respecto a los días anteriores: Apenas había argelinos en los aledaños de la estación, y el interior de la misma había recuperado la calma respecto a horas antes, cuando centeneres de personas, sentadas sobre sus equipajes o directamente en el suelo, poblaban el recinto, a duras penas refrigerado por unos aparatosos e insuficientes ventiladores suspendidos del techo. Pero las aglomeraciones y las esperas se repetirán, ya que la Operación Paso del Estrecho no finaliza hasta el 7 de septiembre.