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El IVAM muestra la obra de Lajos Kassák, que vinculó Budapest con las capitales de las vanguardias europeas

Ferran Bono

Budapest formó parte del espacio urbano que dio lugar a las vanguardias europeas de principios de siglo junto a ciudades como Berlín, Varsovia, Viena, Praga o París. Fue en esta última capital donde Lajos Kassák contactó con Picasso, Apollinaire, Modigliani y Marinetti, pero su inquieta trayectoria se entrecruza también con la Bauhaus y otros círculos clave del arte moderno. De hecho, Kassák (1887-1967) encarnó el ideal vanguardista por su dedicación polifacética a la pintura, arquitectura, literatura, diseño y tipografía, además de ser activista político. A pesar de que su obra plástica no ha gozado de la misma trascendencia que la de otros compañeros, como Moholy-Nagy, que salió de Hungría con el advenimiento del régimen comunista, Kassák fue un referente clave en la vanguardia húngara. Fue una especie de "profeta" para los artistas de su tiempo, señaló Emmanuel Guigon, quien ha sido el comisario, junto a Georges Daranyi, de la exposición Lajos Kassák y la vanguardia húngara, que ayer se inauguró en el IVAM. El museo valenciano continúa su labor de investigación de las vanguardias europeas. Cerca de 100 obras se han reunido en la primera muestra dedicada al mundo y a la producción de este comunista mal visto por el régimen prosoviético húngaro y conocido fuera de sus fronteras sobre todo por sus diseños tipográficos. Kassák fundó la revista MA (Hoy) en la que colaboraron algunos de los más importantes artistas de vanguardia. La exposición, que se clausurará el 26 de septiembre, exhibe un buen número de las portadas y diseños de esta publicación radical de izquierdas y reúne unos 50 óleos y composiciones de papel de Kassák y artistas de su grupo como Bortnyik, Uitz, Moholy-Nagy o Péri, procedentes de múltiples museos y colecciones. Organizada cronológicamente, la muestra propone un recorrido a través del expresionismo, el futurismo y otros movimientos hasta desembocar en una gran sala que agrupa las obras constructivistas y geométricas de Kassák que se han conservado. Una gran parte de su producción fue pasto de las llamas en la Segunda Guerra Mudial.

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Sobre la firma

Ferran Bono
Redactor de EL PAÍS en la Comunidad Valenciana. Con anterioridad, ha ejercido como jefe de sección de Cultura. Licenciado en Lengua Española y Filología Catalana por la Universitat de València y máster UAM-EL PAÍS, ha desarrollado la mayor parte de su trayectoria periodística en el campo de la cultura.

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