Telefónica mantiene, "en principio", el fichaje del comisario Bangemann
A pesar de la polémica suscitada, Telefónica ha decidido seguir adelante con el fichaje del comisario europeo Martin Bangemann, y afirmó ayer que, "en principio", mantiene el contrato. En Alemania, los liberales del FDP, el partido de Bangemann, debatieron ayer su posible expulsión. Aunque finalmente decidieron no llevarla a cabo, sí recomendaron al ex comisario "reflexionar" sobre su decisión, mientras los democristianos alemanes (CDU) solicitaron que renuncie al contrato.
Telefónica señaló ayer que, "en principio", sigue adelante con el polémico fichaje del ex responsable de Telecomunicaciones en la Comisión, Martin Bangemann, que ha sido denunciado por los Quince ante el Tribunal Europeo de Justicia. La empresa española de telecomunicaciones rechazó hacer comentario alguno sobre la decisión de Bruselas de llevar a Bangemann a la corte europea. El Gobierno, a través de su portavoz, Josep Piqué, manifestó su deseo de que la polémica "se resuelva, al final, en términos favorables para las instituciones comunitarias". Piqué señaló que el Ejecutivo mantendrá "una actitud de transparencia y de facilitar al máximo las cosas". El portavoz del Gobierno no observó "contradicción" entre esta posición y la mantenida anteriormente por el Ejecutivo, en el sentido de que no podía opinar sobre "una decisión de una persona concreta contratada por una empresa privada en la que no tiene ninguna participación".
Quienes no han recortado con tanta cautela sus comentarios han sido los partidos alemanes, especialmente los cristianodemócratas del CDU. El partido de Bangemann, el FDP, sin embargo, no pasó de la tarjeta amarilla.
Los liberales alemanes debatieron la posible expulsión de Bangemann, aunque finalmente no la aprobaron. A pesar de que la crítica al proceder del comisario europeo fue unánime, la cúpula federal de los liberales descartó, al menos de momento, la opción de la expulsión del partido, en la confianza de que Bangemann "reflexionará" sobre su decisión de pasar a la empresa española.
El FDP decidió no expulsar a Bangemann porque "no ha causado conscientemente daños al partido". Ya antes de la reunión de la cúpula, el presidente de los liberales, Wolfgang Gerhardt, avanzó que no se decidiría sobre el futuro de Bangemann en el partido porque "para proceder a la expulsión hay que seguir ciertas reglas, entre otras escuchar al interesado". No obstante, criticaron su "injustificable comportamiento" y le invitaron a "reflexionar sobre su decisión", aunque sin pedirle específicamente que renuncie a su contrato con Telefónica.
Sí fue explícita, en cambio, la Unión Cristiano Demócrata (CDU), que pidió al comisario europeo que renuncie a su contrato con Telefónica. El portavoz para asuntos europeos del grupo parlamentario de la CDU, Peter Hintze, pidió a Bangemann, en rueda de prensa, que sacrifique su contrato "para evitar una imagen negativa".
Hintze añadió que Bangemann tiene una responsabilidad política. "El problema no es jurídico, sino moral y político", manifestó.
