Los populares intentan abrir fisuras en la coalición del Ayuntamiento de Córdoba

El grupo municipal del PP de Córdoba no ha querido esperar a que transcurran los 100 días de cortesía que se suelen conceder a los gobiernos que se constituyen tras unas elecciones. Ayer, siete días después de que se formara la nueva Corporación cordobesa, el PP lanzó sus primeras críticas a la gestión de la alcaldesa, Rosa Aguilar (IU). La reprobación al corto trabajo de la regidora municipal la hizo Luis Martín, portavoz del anterior equipo de gobierno popular, quien advirtió de que en esta legislatura municipal que ha comenzado será el ex alcalde Rafael Merino quien ostente ese cargo. Merino se entrevistó por la mañana con la alcaldesa y tras el encuentro abandonó el Ayuntamiento y no participó en la conferencia de prensa. Martín explicó lo que hasta el momento "ha visualizado" el PP del gobierno de coalición surgido del pacto entre Izquierda Unida y PSOE. Sus críticas trataron de crear fisuras en el equipo de gobierno, compuesto por seis concejales de IU (incluida la alcaldesa) y cuatro socialistas. "No se han guardado las formas en esta primera semana", dijo Luis Martín cuando se refirió a que la alcaldesa destituyó al director del Gran Teatro, Manuel Ángel Jiménez, a las pocas horas de tomar posesión y sin contar con la opinión sus socios de gobierno. En el acuerdo suscrito entre IU y PSOE para el gobierno de la ciudad, a los socialistas les corresponde la gestión del área de Cultura, y a su teniente de alcalde, Angelina Costa, la presidencia de la Fundación Pública Gran Teatro. Martín destacó que la destitución de Manuel Ángel Jiménez "ha sido un pulso de Rosa Aguilar contra el PSOE". Por su parte, Rosa Aguilar ha explicado que la destitución de Jiménez venía obligada por el contrato que firmó cuando el Partido Popular gobernó en Córdoba. La alcaldesa comentó que en una de las cláusulas del contrato figura que éste se rescindiría cuando cesara el gobierno municipal surgido de las urnas en 1995. Aguilar responsabilizó de este asunto al PP por no haber informado antes al director del Gran Teatro de que acababa su gestión. Martín denunció también que otra de las primeras medidas adoptadas por la alcaldesa ha sido otorgar más competencias a la Comisión de Gobierno (integrada por los miembros del gobierno municipal) y restarlas del pleno. Sobre este punto indicó que Aguilar "va a hurtar competencias al pleno y las va a ampliar a la Comisión de Gobierno", con lo que "sólo diez personas van a decidir" los asuntos más importantes de la ciudad. Martín se refería así al decreto firmado por Rosa Aguilar en el que fija las nuevas delegaciones municipales y anuncia que va a poner en práctica la modificación hecha el pasado 21 de abril a la Ley de Bases del Régimen Local, que le permitirá dar más atribuciones a la Comisión de Gobierno en detrimento del pleno. Resolución de asuntos En ese decreto, la regidora municipal indica que al equipo de gobierno le corresponde la resolución de toda clase de asuntos en todas aquellas materias que, siendo competencia de la alcaldía, sean susceptibles de delegación, "incluyendo expresamente la aprobación de los planes urbanísticos no reservados al pleno, y los instrumentos de gestión urbanística y proyectos de urbanización". Asegura también que "las facultades resolutorias que se delegan en la Comisión de Gobierno serán extensivas tanto en vía de gestión como de recursos administrativos". El concejal del Partido Popular dijo que esta medida contradice el mensaje que Rosa Aguilar propagó durante la campaña electoral, referido a que quería la máxima participación de los grupos políticos y de los ciudadanos en la toma de decisiones. "Al igual que ocurrió con el pacto, que dijeron que no habría y que más tarde se hizo, puede ocurrir que esa llamada a la participación quede en agua de borrajas". afirmó.