Éxodo exótico

Israel es un pueblo con un espíritu nómada muy particular. Por de pronto, buena parte de sus habitantes procede de otros países. Quizá influidos por este talante, un grupo de 180 turistas aterrizó ayer en Foronda. Detrás de ellos llegará un avión desde Tel Aviv cada jueves durante los próximos tres meses. La experiencia es novedosa y exótica en Vitoria, donde la terminal de pasajeros del aeropuerto ha tenido en los últimos años cierta tendencia a formar telarañas. Esta nueva iniciativa responde a una idea tan efectiva como poco novedosa. Dada la saturación de Madrid-Barajas y El Prat de Barcelona, las instituciones y el sector hostelero de la provincia se han agrupado formando la agencia Álava Incoming, que acude a las grandes ferias nacionales e internacionales y ofrece paquetes turísticos. El primer promotor en recoger el guante ha sido Eric Berman, director de Ophir Tours. "Es muy extraño, lo sé; pero creemos en este proyecto", espetó ayer el empresario poco después de bajar la escalerilla del Airbús y atender algo estupefacto al recibimiento que se dispensó al grupo, con aurresku incluido. Fueron unos honores más propios de una autoridad que de simples turistas. De momento, la iniciativa ha tenido un éxito pleno, al llenarse el primer avión. Y eso que, según Berman, algunos de los pasajeros no saben nada del País Vasco. "Otros conocen bastante, y algunos estaban estudiando los prospectos en el avión porque no sabían exactamente dónde ir". Casi todos eran de mediana edad. La oferta comprende 16 posibilidades diferentes, aunque lógicamente la mayoría de los turistas utilizará Vitoria como plataforma. Muchos viajarán en autobús durante los siete días por Madrid, Barcelona y Bilbao [el creador de la Fundación Guggenheim, Solomon, era judío], para terminar este apretado calendario en los sanfermines. "La mayoría", comenta el presidente de Álava Incoming, Carlos Suso, "llega con el chip de ir a Madrid. Es lógico. Como quien va a Estados Unidos quiere ver Nueva York, o el que va a Francia quiere visitar París". Cada viajero paga 115.000 pesetas por el paquete básico (avión más hotel), a lo que se añadirán una media de unas 80.000 pesetas por semana y persona en otros gastos, según los primeros cálculos. "El agregado cultural de la Embajada israelí en España nos dijo que los turistas de su país son un chollo, porque gastan más de lo que le gustaría al Gobierno", bromea Carlos Suso. Ahora, el reto de los promotores locales está en aumentar el número de pernoctaciones en el País Vasco. "Habrá que adaptarse", admiten los responsables de la iniciativa. Como estrategia para difundir los atractivos de Euskadi, siete periodistas llegaron en la avanzadilla de ayer. "Emitirán cuatro programas en la principal televisión de Israel", aseguró Berman. También llegaron reporteros de periódicos en lengua rusa y española.