La oleada de importaciones textiles lleva al cierre a Serra Feliu y a Sedunión
El aumento de las importaciones textiles a bajo precio está castigando a las empresas del sector en España. Las empresas catalanas Serra Feliu y Sedunión han anunciado el cierre, debido al descenso de ventas. Otras sociedades, como la barcelonesa Coma Cros, atraviesan serias dificultades, mientras que la planta de la multinacional Levis en Girona ha presentado un expediente de regulación de empleo de seis días para 250 de sus 300 trabajadores. Serra Feliu decidió ayer el cierre de la empresa, que se hará efectivo el próximo día 29. La dirección de Serra Feliu informó al comité de empresa de la decisión de cierre tras una reunión del Consejo de Administración. La empresa catalana ha tomado esta decisión debido a las dificultades para superar la caída de las ventas que ocasionan las importaciones a bajo precio y a sus elevadas deudas. La centenaria empresa algodonera, que emplea a 140 trabajadores, acumula unas deudas de 1.300 millones de pesetas con Hacienda y la Seguridad Social.
Fuentes sindicales afirmaron que la compañía ha sufrido el embargo de sus cuentas por parte de Hacienda para hacer frente a los pagos. Con todo, estas fuentes restaron importancia al embargo y recalcaron que en otras ocasiones " se ha llegado a acuerdos" para aplazar el pago.
Los miembros del comité de empresa de Serra Feliu no aceptan el cierre y quieren movilizar a la Geneneralitat para que busque soluciones a la crisis. La empresa pública Eplicsa, controlada por la Generalitat de Cataluña, ya entró en el capital de Serra Feliu, pero salió de la empresa hace tres meses.
Los accionistas de Serra Feliu, entre los que se encuentra la familia del mismo nombre, han decidido no realizar una ampliación de capital para enjugar pérdidas y reflotar la sociedad. La empresa tiene previsto ratificar la decisión el próximo 29 de junio, según fuentes sindicales. La compañía ya vivió una fuerte crisis en el periodo 1992-1993, cuando suspendió pagos y se vio obligada a plantear un plan de viabilidad para enderezar la situación.
Sedunión, situada en la localidad barcelonesa de Sant Cugat del Vallès, ha pactado la rescisión de empleo de 63 trabajadores y cesará en su actividad.
Coma Cros, radicada en la localidad gerundense de Salt, también atraviesa dificultades. El alcalde en funciones, Xavier Corominas, quiere que la Generalitat intervenga para ayudar a la empresa. La dirección no se pronuncia y el comité de empresa señala que la sociedad dará a conocer sus planes el próximo día 21.
La dirección de la multinacional Levis realizará una regulación de empleo de seis días en su fábrica de Bonmatí (Girona), que afectará a 250 de sus 300 trabajadores, según fuentes sindicales. El motivo es el descenso de las ventas.
