Los separados malagueños podrán ver a sus hijos en puntos de encuentro
Hasta ahora, los jueces de Familia han tenido difícil garantizar el cumplimiento del régimen de visitas a los hijos impuesto en las sentencias de separación o divorcio. Si el progenitor que no tiene la custodia sufre problemas personales, conflictos con la otra parte o si, simplemente, no dispone de un lugar para estar con sus hijos, el régimen acaba incumpliéndose. El Ayuntamiento de Málaga ha puesto a disposición de estos padres y madres un punto de encuentro donde cumplir las visitas, que empezará a funcionar el viernes.
Este punto de encuentro es una experiencia piloto en Andalucía. En muchos países europeos, EE UU, Canadá y Australia funcionan hace años, pero en España sólo hay dos abiertos, en Valladolid y Barcelona. El punto de encuentro de Málaga fue solicitado por los jueces de Familia de la capital en el mes de marzo. El titular del Juzgado número 5, José Luis Utrera, propuso la medida tras detectar que en 1998 se habían registrado en el partido judicial de Málaga 200 casos en los que el régimen de visitas no se había podido cumplir. Según el informe, el incumplimiento se produce generalmente por conflictos entre los padres, o porque el progenitor que no tiene la custodia no dispone de un lugar adecuado para los niños, o porque padece problemas personales (drogadicción, alcoholismo) que hacen que el ex cónyuge que tiene la custodia se niegue a depositar a los niños cuando corresponde. Estos centros permiten la independencia de las familias pero también garantizan un control de las visitas. En Valladolid y Barcelona se habilitaron pisos para este fin, pero el Ayuntamiento de Málaga ha decidido no esperar a tener un piso, y de momento comenzará a ofrecer el servicio utilizando una guardería municipal que, a partir de las 17.30 horas de los viernes, hará las veces de punto de encuentro. El servicio le costará al Área de Bienestar Social alrededor de 4 millones al año. "El centro estará atendido por cuatro psicólogos, cuatro trabajadores sociales y cuatro educadores", explica la concejala delegada del área, Mariví Romero (PP), que asegura que la decisión de utilizar la guardería se ha tomado "porque nos parecía fundamental comenzar cuanto antes". De momento, serán los juzgados de Familia los que deriven hacia el centro a los progenitores que lo necesiten, y ésto les permitirá llevar un control del desarrollo de las visitas. "Se registrará la hora de llegada de los padres, la hora a la que es depositado el niño, y se dará orientación a los padres que lo necesiten para que la relación con sus hijos sea lo más plena posible, sin dañar su intimidad", indica Romero.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.