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"No se han arrancado los ojos"

Lo resaltaron varias voces del público nada más abrirse el turno de preguntas: "Son de distintos partidos, pero se han portado muy bien. Si fueran hombres, se hubieran arrancado los ojos". Y es que, algo insólito en un debate preelectoral entre candidatos de opciones políticas opuestas, la discusión e incluso las discrepancias brillaron por su ausencia ayer en la sede del Club Don-na de Barcelona. Magda Oranich, segunda en la lista de CiU por Barcelona; Marina Subirats, quien ocupa el cuarto lugar de la candidatura del PSC, y Elsa Blasco, candidata de IC-V, también en el número cuatro, no sólo coincidieron en sus posturas sobre el tema que las había reunido -el papel de las mujeres en la política local-, sino que se intercambiaron elogios y se lanzaron continuos guiños de complicidad. Marina Subirats, quien al igual que Oranich resaltó su condición de independiente en la candidatura por la que se presenta, afirmó que la lucha contra la discriminación de las mujeres no tiene por qué entender de ideologías de partido. "Pertenezcamos a uno o a otro partido, desde el Ayuntamiento haremos todo lo que esté en nuestras manos en favor de las mujeres", señaló. Magda Oranich tomó luego la palabra para rematar la sentencia de Subirats: "No sé quién gobernará, pero, si nos lo dejaran hacer a nosotras, estaríamos de acuerdo en todo lo que se refiere a la mujer". Teñir la política de violeta El debate, al que asistió una cincuentena de mujeres, arrancó con la intervención de Elsa Blasco, quien desgranó los principales ejes del programa del partido ecosocialista encaminados a "teñir de violeta las políticas que se hacen desde los ayuntamientos". Oranich y Subirats no tuvieron necesidad de detallar sus propuestas en favor de la mujer: corrían el riesgo de aburrir a la audiencia porque habrían repetido prácticamente la primera intervención. Durante el debate se habló del Primer Congreso de las Mujeres de Barcelona, celebrado el pasado mes de febrero, y las tres candidatas asumieron las conclusiones surgidas en el encuentro: hay que transformar la ciudad para que incorpore la mirada y la voz femenina, crear guarderías públicas, fomentar la ocupación entre las mujeres, luchar contra los mensajes sexistas difundidos a través de la publicidad y los medios de comunicación.... "Sobre todo, que el Ayuntamiento se ocupe más de las personas", resaltó Subirats. Una tarea en la que, coincidieron las tres candidatas, las mujeres deben jugar un papel muy importante". "Nosotras tenemos una sensibilidad que no tienen los hombres", dijo Oranich. "La visión de las mujeres es distinta a la de los hombres. Hay cosas que a ellos no les interesan", añadió Subirats. El interés de los partidos políticos por "fichar" mujeres fue también tema de conversación, que no de discusión, durante el debate. "Ahora, los grandes fichajes son de mujeres. Nos utilizan porque damos votos, pero ya me está bien", dijo la candidata de CiU.

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