El PSOE pide la dimisión del alcalde y revela que participa en una empresa de vinos

El Partido Socialista Obrero Español, a través de su candidata Cristina Narbona y de los concejales Rafael Simancas y Ruth Porta, exigió ayer la dimisión del alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, al que pidieron que detalle ante la ciudadanía sus vinculaciones con la empresa inmobiliaria Incoda y si tiene nexos en otros negocios. Simancas reveló que el alcalde es accionista de la empresa vinatera Viña Salceda, de El Ciego, en La Rioja alavesa. Fuentes de esta entidad informaron a EL PAÍS de que el alcalde vendió su participación en julio de 1998.

Cristina Narbona, candidata número dos de la lista socialista al Ayuntamiento de Madrid, dijo ayer, en conferencia de prensa, que los vínculos empresariales del alcalde de Madrid los ha establecido en un sector como el inmobiliario, "en el que se han concentrado los mayores atropellos". "Madrid", agregó, "es la ciudad donde más ha crecido el precio del suelo y donde más cara es la vivienda".A su juicio, "el precio de la vivienda se ha multiplicado por cuatro, y una vivienda cuesta, por término medio, 25 millones. Ese problema, que resulta impresionante para los ciudadanos", explicó Narbona, "no ha sido evitado, sino propiciado por el PP". Estas manifestaciones las realizó Narbona en la sede de la FSM, en ausencia de Fernando Morán, candidato socialista a la alcaldía de Madrid, a la sazón en Bilbao en el sepelio de Ramón Rubial, presidente del PSOE.

La candidata socialista señaló: "Independientemente de que la conducta del alcalde sea o no sancionada por los tribunales, se trata de una falta ética". Por su parte, la concejal y candidata Ruth Porta puntualizó: "Quizá no resultara ilegal que un párroco tuviera un negocio de alterne, pero su feligresía, con certeza, reprobaría como inmoral un hecho así".

"Dada la poca importancia que el alcalde da a estos hechos", dijo Cristina Narbona, "no sabemos si tiene otras vinculaciones a actividades que sí considera realmente importantes". Y añadió: "¿Cuántas otras participaciones tienen él u otros miembros de su familia? Sus respuestas han sido insuficientes".

Por su parte, Rafael Simancas, concejal y candidato, señaló: "Exigimos que el alcalde dimita, por higiene democrática, porque está inhabilitado ética y políticamente para ejercer una alcaldía como la de Madrid, que requiere de una altura moral de la que Álvarez del Manzano carece".

Simancas destacó que la empresa a la que el alcalde se encuentra vinculado (Incoda) "es propietaria del suelo más caro". Y a continuación anunció: "José María Álvarez del Manzano es accionista de la compañía Viña Salceda, que comercializa vino de Rioja". Fuentes de esta entidad, afincada en la localidad de El Ciego, en La Rioja alavesa, informaron ayer a este diario de que el alcalde de Madrid vendió su participación en julio del año pasado, fecha en la que fue adquirida por la firma vinatera navarra Julián Chivite. Simancas agregó luego a este diario que el alcalde adquirió posteriormente una participación en Bodegas y Viñedos del Marqués de Vargas, de Logroño, denuncia que este diario no pudo ayer confirmar.

"Un tiburón más"

"De un hombre que ha recibido la confianza de sus conciudadanos para gestionar cientos de miles de millones de pesetas", agregó Rafael Simancas, "resulta inaceptable que se una a ellos como un tiburón más". Simancas prosiguió: "El PP parece la cueva de Alí Babá, y Álvarez del Manzano, el jefe de la banda. Que se vaya", exigió, "¡y que se vaya ya! El alcalde está inhabilitado porque ha habido casos de corrupción institucional, como hemos comprobado en la Comisión de Vigilancia de la Contratación".

Por su parte, Mercedes de la Merced, candidata número dos del PP en la lista del Ayuntamiento, salió al paso de estas acusaciones: "Si el PSOE tiene cualquier duda respecto de la actuación de cualquier concejal, o del alcalde, debe ponerlo en conocimiento de los tribunales, y que los tribunales lo juzguen. Lo que ocurre", añadió De la Merced, "es que cada vez que han hecho eso los tribunales han dictaminado que no hay ninguna irregularidad y no se ha procesado a ningún concejal, a pesar de que han intentado hacerlo durante estos últimos años", declaró a Europa Press. La candidata del PP concluyó: "Nadie puede darnos lecciones de ética y moral, y mucho menos decir que en el Ayuntamiento hay corrupción institucionalizada. Yo no sé qué ocurría antes de 1991, pero como miembro de esa corporación desde ese año, personalmente, y con todo mi respeto, no le consiento a un compañero que intente sembrar de dudas la actuación de todo un equipo municipal".