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Versos con envoltorio musical

Con la Banda Municipal de Barcelona en el escenario, la música arropó anoche el Festival Internacional de Poesia de Barcelona. La Desintegración morfológica de la Chacona de Bach, de Xavier Montsalvatge, se alternó con los versos de los 11 poetas llegados de nueve países, sentados entre los músicos. Además de los versos bucólicos del australiano Les Murray, varias veces candidato al Nobel, destacó la guturalidad del tunecino Tahar Bekri y la espectacularidad del surafricano Lesego Rampokoleng, más parecido a un cantante de rap que a un bardo de corte europeo. Si el festival puso la guinda a Barcelona Poesia, el acto más solemne tuvo lugar la noche del lunes: el homenaje a los poetas de la Escuela de Barcelona, y especialmente a su último representante, el recientemente fallecido José Agustín Goytisolo. En el marco clásico del Teatre Romea, cuatro actores de primera fila (Anna Lizaran, Jordi Dauder, Mario Gas y Julieta Serrano) recitaron poemas de Gabriel Ferrater, Jaime Gil de Biedma, Carlos Barral, Alfonso Costafreda y el citado Goytisolo. El llenazo fue total, e incluso medio centenar de personas se quedaron fuera del local. Lo sobrio del escenario y lo teatral de la declamación no permitieron, sin embargo, que la temperatura poética alcanzara todo el grado de ebullición que la ocasión requería. No obstante, se elevó un suspiro unánime cuando Dauder anunció Palabras para Julia. A la salida, el público tuvo que sortear a los resistentes que, retenidos en la puerta, se habían montado su homenaje particular. Menos elegante, pero más vivo. Incluso Dauder y Gas se pararon un momento y les recitaron algo, sin duda con un tono más espontáneo.

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