El juez dice que no hay pruebas contra un imputado en el "caso Natzaret"

El magistrado encargado de investigar la muerte de Antonio Civantos, linchado en Natzaret (Valencia) tras atropellar mortalmente a un niño de 20 meses, recuerda en su contestación a una petición de investigaciones de la acusación particular la falta de pruebas contundentes que incriminen al segundo imputado en el caso, Jesús G. J. . "No existe una sola diligencia de investigación policial de entidad que permita respaldar su intervención en los hechos", apunta Vicente Ríos. El titular del Juzgado de Instrucción número 15 de Valencia asegura que la imputación que pesa sobre Jesús G.J., en libertad provisional, se basa en "informaciones anónimas, de referencia, cambiantes y contradictorias, habiendo admitido él mismo que sólo llegó a la calle Algemesí tras la propia policía local". La acusación particular y el fiscal solicitaron su imputación en base a las declaraciones de un testigo. El juez hace esta aseveración después de denegar la práctica de algunas diligencias de investigación. Ríos se opone a ellas, entre otras cosas, porque la instrucción del caso no puede convertirse en "un cajón de sastre que trate de recoger líneas de investigación no emprendidas o desechadas por quienes tienen tal tarea", en referencia a la policía.