El paro se sitúa en el 10,47%, la menor tasa desde 1980, pero el ritmo de caída se suaviza

La desaceleración del crecimiento económico empieza a tener su reflejo en el paro. El desempleo se redujo en abril en 49.159 personas y, al igual que en los otros tres meses de este año, las cifras son más desfavorables que las de 1998 y confirman que se está frenando la caída del paro. Pese a esa ralentización, el número de parados se sitúa en 1.708.000, el más bajo desde 1981, y la tasa, en el 10,47%, la menor desde octubre de 1980. La contratación fija mejora y supone el 10,97% del total, mientras que los nuevos contratos a tiempo parcial empiezan a despegar.

Los cuatro primeros meses de este año muestran una evolución del paro paralela al crecimiento de la economía, y menos positiva que la del mismo periodo de 1998. Mientras que en el primer cuatrimestre del pasado año se produjo una disminución de 107.679 desempleados, este año ha sido de 77.692.En abril pasado la reducción ha sido de 49.159 personas, frente a 71.150 del mismo mes de 1998. El menor descenso no es achacable al tirón del empleo por la oscilación de fechas de las vacaciones de Semana Santa, dado que la bajada en marzo también fue menor: 26.781 y 28.700, respectivamente.

La disminución del paro un 2,8% en abril situó la cifra total de parados en 1.708.000 personas, según los datos difundidos ayer por el Ministerio de Trabajo. Se trata de la cifra más baja desde noviembre de 1981, y la tasa sobre población activa, que se sitúa en el 10,47%, es también la más reducida desde octubre de 1980. En los últimos doce meses, el paro ha descendido en 259.980 personas (13,21%) y la tasa ha pasado del 12,14% al 10,47% citado. En el menor descenso de este año cuenta también que se parte de un techo más bajo que el año pasado. La bajada del paro en abril se extiende a todos los sectores. La mayor en números absolutos corresponde a los servicios, que registran una disminución de 24.093 parados (2,64%). En la construcción se produce el retroceso más elevado en términos porcentuales (4,86%), y que supone 8.415 personas. En el colectivo sin empleo anterior desciende en 7.949 (2,51%); en la industria, en 6.865 (2,28%), y en la agricultura, en 1.837 personas (3,49%).

Bajada en las comunidades

También se benefician todas las comunidades autónomas del descenso del paro. El mayor descenso corresponde a Andalucía (11.825), seguida de Cataluña (4.705), Baleares (4.625), Galicia (4.171) y País Vasco (4.037).El desempleo masculino se sitúa en 707.893 parados, tras disminuir en 29.201 (3,96%) en abril, y el femenino en 1.000.107 desempleadas, con un descenso de 19.958 (1,96%) durante el mes pasado.

En comparación con abril de 1998, el paro masculino baja en 155.177 desempleados (17,98%) y el femenino en 104.803 paradas (9,49%), mientras que la tasa respecto a la población activa se sitúa ahora en 7,17% para los hombres (8,74% en abril de 1998) y en el 15,55% para las mujeres (17,44% el cuarto mes de 1998).

El Inem excluye actualmente de las listas de paro oficiales a 678.000 demandantes de empleo. Según datos difundidos por Servimedia, se trata de 173.598 personas que buscan empleos con jornada semanal de menos de 20 horas, 35.923 demandantes de empleos coyunturales de menos de tres meses, 160.670 estudiantes, 264.795 jornaleros eventuales del campo que perciben subsidio y 43.104 prejubilados.

Las cifras oficiales publicadas ayer por Trabajo reflejan que en abril se registraron 1.043.161 contratos, la mayor cifra en ese mes de la serie histórica, y que representa un incremento de 139.055 (15,38%) sobre el mismo mes de 1998.

Los contratos de carácter indefinido han sido 114.401, lo que representa un 10,97% de las colocaciones de ese mes, porcentaje que supone un récord histórico, mientras que en los meses anteriores se ha situado entre el 8% y el 9%. Del total de contratos fijos, 95.719 se han realizado al amparo de la reforma laboral, y 32.343 son conversiones de temporales en indefinidos. Desde el 17 de mayo de 1997, fecha de entrada en vigor de la reforma laboral, se han registrado 1.377.840 contratos indefinidos e incentivados.

La modificación de los contratos fijos a tiempo parcial, que entró en vigor en enero pasado, tras el acuerdo entre Trabajo y los sindicatos y con la oposición de la patronal CEOE, parece que empieza a abrirse camino. En el mes pasado se realizaron 28.608 colocaciones bajo esa modalidad, lo que supone que se han duplicado las 14.087 registradas en el mes de abril de 1998. De ellas, 8.120 son conversiones de temporales en indefinidos, y 20.488 iniciales fijos a tiempo parcial. Los contratos temporales ascienden a la cifra de 928.760, y la figura más utilizada es el eventual por circunstancias de la producción (354.127), seguido de obra o servicio determinado (323.426), y tiempo parcial de duración temporal (158.141).

Duración de los contratos

El secretario general de Empleo, Juan Chozas, admitió ayer que "la duración de los contratos temporales tiende a ser menor", pero también precisó que crece el volumen de indefinidos "hasta cifras récord". Chozas consideró positivo el descenso en casi 50.000 parados en abril, y subrayó que supera la bajada media en los últimos quince años en ese mes (37.317). Para el secretario general, "este año está siendo un muy buen año para el empleo, si bien hay que seguir consolidando el descenso que se viene registrando".El criterio del PSOE, IU y los sindicatos es diferente y ayer mostraban su preocupación por el menor ritmo del descenso del paro. El diputado socialista José Antonio Griñán (exministro de Trabajo) alertó sobre esa desaceleración con respecto a otros años, a pesar de que cada vez hay menos incorporaciones en las listas del Inem y del elevado número de contratos firmados.

La secretaria de Empleo de IU, Susana López, criticó "la injustificada autocomplacencia del Gobierno ante la elevada precariedad laboral y la caída del ritmo de reducción del desempleo".

CCOO mostró a través de un comunicado su preocupación por esa menor caída del paro, y concretó los tres problemas que afectan al mercado de trabajo en el alto volumen de desempleo, especialmente de mujeres y jóvenes; el elevado peso de la contratación temporal y el bajo nivel de protección social por desempleo. Para el secretario general de UGT, Cándido Méndez, la situación del mercado laboral, pese al descenso del paro en abril, "no invita a la tranquilidad". En Valencia declaró que la creación de empleo en 1999, y también a lo largo del último semestre de 1998, está basada "en actividades de la construcción y los servicios de carácter estacional", que se nutren de contratos temporales.