"Vuelvo a Europa para trabajar en la Estación Espacial Internacional"

Pedro Duque es el tipo de héroe que podría ser el vecino de la puerta de al lado, pero no es una persona corriente. Es un astronauta que ha volado al espacio (el primer español) hace seis meses en el transbordador Discovery y cumple perfectamente el papel de estrella que le toca representar ahora para acercar el espacio a la sociedad. Pero al hablar con él demuestra enseguida que es una persona muy inteligente, con una cabeza perfectamente organizada y eficaz, y un fino sentido del humor: "Aprendí mucho de mis compañeros incluso antes del vuelo. Como yo era el único novato en el Discovery, cuando alguno sentía la necesidad de dar un consejo, tenía que ser a mí, y yo los tomaba todos con gusto". Este astronauta de la Agencia Europea del Espacio (ESA) de 36 años pasa unos días en España y cuenta sus planes para volver a trabajar en Europa. Pregunta. ¿Cuándo vuela de nuevo al espacio?

Respuesta. Será ya en la Estación Espacial Internacional (ISS), dentro de unos cinco años. Por la cantidad de astronautas que hay y el número de vuelos programados, no creo que me toque nada del montaje de la estación. Hay muchos europeos (somos 15 astronautas de la ESA) delante de mí, porque yo acabo de volar.

P. ¿Qué hace un astronauta entre vuelo y vuelo?

R. Participa en los proyectos como asesor de los diseños para que, desde el punto de vista operativo, sean útiles en el espacio. También fiscaliza un poco la ergonomía y seguridad de los equipos, porque nadie mejor para echar un vistazo a la seguridad que quien va a estar allí jugándose el pellejo.

P. ¿Qué proyectos?

R. Sobre todo la ISS. Yo regreso a Europa este verano para dedicarme a ese tipo de trabajo en el centro tecnológico (ESTEC) de la ESA, en Holanda, y estar en contacto directo con los proyectos europeos, en vez de seguir en Houston, con los proyectos de la NASA.

P. ¿Qué se hace en ESTEC?

R. Están con el Columbus, el módulo europeo de la ISS. Además está el brazo robótico que irá en la parte rusa. También se ha encargado ESTEC del sistema central de computadoras del módulo de servicio ruso. Luego está la nave automática ATV, y nos interesa mucho porque ya hemos visto lo que puede hacer una nave de carga cuando se da un golpe con una estación, como pasó con la Mir, y no nos hace la más mínima gracia que vuelva a pasar.

P. Si va a la estación dentro de cinco años, significa una misión de tres meses o más.

R. Sí. Es para lo que estamos en esto, porque, para los europeos, ir en el transbordador es un poco artificial. Nosotros estamos para los experimentos en la ISS y punto.

P. ¿Qué cambia en la vida de un astronauta después de haber volado al espacio?

R. Cambia bastante en el sentido de que dices las mismas cosas, pero ahora te hacen caso.

P. ¿Cómo se toma la ESA la estación? ¿No es un poco comparsa de EEUU y Rusia?

R. No podemos hacer otra cosa: nuestro presupuesto es cinco veces menor que el de Estados Unidos.

P. ¿Qué espera de la inminente reunión ministerial de la ESA de cara a la ISS?

R. Espero que los ministros no hagan aquello de entre todos juntar dinero para un cochazo y luego resulta que no tenemos dinero para la gasolina. Quiero decir que ya se ha acordado cuánto paga cada país europeo en la estación y qué piezas construye cada uno, y ahora resulta que los gobiernos no llegan a un acuerdo sobre cómo pagar el uso de la ISS, el mantenimiento, para que sirva para algo. Ni a usted ni a mí nos entra en la cabeza, pero es así: está sin decidir.

P. ¿Qué hay que hacer en España para que Pedro Duque no sea una mera anécdota histórica? ¿Ha cambiado algo aquí?

R. Creo que en la lista de países que han enviado propuestas de experimentos para la ISS estamos en el cuarto lugar. En la reunión ministerial se verá qué se hace para que los científicos españoles puedan utilizar la estación. Además, no soy una anécdota, hay muchas empresas españolas que fabrican aparatos para el espacio. Miles de personas en España están implicadas en programas de la ESA, en los cohetes Ariane, en la construcción de satélites, en el Columbus, en el ATV... son españoles que logran contratos espaciales porque lo hacen bien.

P. ¿Cuáles son los objetivos de las misiones tripuladas?

R. Primero, la ciencia: propuestas de investigadores que si no ponen ese cachito de la naturaleza en microgravedad no pueden avanzar en su campo; segundo, el desarrollo tecnológico, que en EEUU es una manera de poner dinero público a disposición de empresas para desarrollar tecnologías nuevas y es muy rentable para la sociedad; y tercero, a la humanidad le hace mucha ilusión ir al espacio, a la gente siempre le ha gustado la exploración.