Libertad provisional para el detenido por la muerte de una prostituta en Valencia

El titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Valencia dejó esta madrugada en libertad provisional (con obligación de comparecer cada 15 días) a Eduardo Andrés Borso di Carminati, el decano de los ingenieros industriales de Valencia que prestó declaración dentro de las investigaciones tras la muerte a golpes de la ciudadana polaca Ewa Striniak, una prostituta de lujo. Striniak fue hallada muerta en su casa con el cráneo destrozado a golpes. Según fuentes cercanas al caso, el ejecutivo, técnico de Iberdrola, era cliente suyo.

Eduardo Andrés Borso di Carminati, de 48 años de edad, fue precisamente quien advirtió a la policía, hacia las 21.00 horas del pasado domingo, de la existencia del cadáver, postrado en una cama. Esta madrugada, tras abandonar el juzgado, Borso comentó: "Claro que soy inocente. ¿Cómo voy a ser culpable? Dejadme en paz". El cuerpo de la mujer, de 45 años, tenía cuatro heridas en la cabeza, dos en el tórax y la tapa de los sesos levantada por los golpes propinados con un objeto contundente. Alrededor de las 11.00 del lunes, agentes del Cuerpo Nacional de Policía arrestaron al ingeniero industrial.

Según fuentes conocedoras del caso, Borso di Carminati era cliente de Ewa Striniak, una prostituta que contaba con una treintena de ellos, algunos de gran relevancia social en Valencia. De hecho, durante las últimas 48 horas, los encargados de la investigación han interrogado a cerca de 30 hombres cuyos nombres estaban en su agenda, además de a varias de las personas con las que el único sospechoso del crimen habló el domingo.

Fuentes policiales aseguran que el nexo que unía a la ciudadana polaca y el supuesto autor de su muerte era mucho más intenso que el habitual entre una prostituta y un mero cliente.

Las huellas de un vaso

Después de tres registros policiales en casa de la víctima -el último, para recoger un vaso en el que podría figurar la huella del supuesto homicida- y otro en el domicilio del imputado, en presencia de su esposa, la policía cree tener suficientes pruebas para incriminar a Borso di Carminati por la muerte de Striniak, a la que sus vecinos recuerdan como una persona elegante, discreta y de trato agradable. Rara vez la vieron acompañada de hombres en su domicilio. Por eso mostraron su asombro al conocer la naturaleza de su trabajo, informa Jaime Prats. La declaración del supuesto homicida ante el juez, que finalizó a primera hora de la madrugada, comenzó hacia las 19.30 horas de ayer. Desde el primer momento había negado cualquier relación con el objeto de la investigación.

Su abogado no quiso realizar ningun comentario. Tampoco el magistrado y el fiscal encargados del caso. El suceso ha causado conmoción en Valencia. El ejecutivo interrogado pertenece a una familia muy conocida de la burguesía y reside en una de las zonas más selectas.

Su padre era el arquitecto Cayetano Borso di Carminati González, uno de los introductores del movimiento arquitectónico moderno, que fue autor, entre otros muchos, de uno de los ejemplos más interesantes del racionalismo en Valencia: el edificio del antiguo cine Rialto.