Sergio García presenta sus credenciales en el Open de España

Sergio García no bromea sino que, llegado al profesionalismo, mantiene el descaro que ilustró su currículo como aficionado. Hace una semana recibió la tarjeta profesional y ayer, en el campo barcelonés del Prat del Llobregat, hizo su estreno en la alta sociedad del golf europeo con nota alta. El Niño, cumplidos los 19 años, presentó sus credenciales ganadoras en el Open de España. No accedió al liderato pero entró en los candidatos al triunfo final. El jugador castellonense hizo 67 golpes, cinco por debajo del par del campo (72). Las mejores tarjetas de la primera jornada, con 65 golpes, correspondieron a los españoles Juan Carlos Aguero e Ignacio Garrido, al sueco Max Anglert y a los ingleses Anthony Wall y Jamie Spence. El italiano Alberto Binaghi, el francés Thomas Levet y el escocés Paul Lawrie, con 66, se intercalaron entre los cuatro mejores y Sergio García. Txema Olazábal, ganador del Masters de Augusta, se conformó con el par del campo.

El campo de golf del Prat es uno de los recorridos fáciles en el circuito europeo profesional, a tenor de la cantidad de jugadores que ayer terminaron la primera actuación del torneo por debajo del par (70 de 156). Esta circunstancia fue aprovechada por la nueva generación europea, nacida en los años setenta. La competitividad la ponen los jóvenes, pero el juego, el carisma, la expectación y la magia todavía pertenecen a los representantes de la cosecha de 1957: Severiano Ballesteros (con molestias en una rodilla, presentó una tarjeta de 73), Nick Faldo (el inglés mantiene sus opciones, con 70) y el alemán Bernhard Langer (74).

El corte será duro

El corte del torneo se presenta caro en la jornada de hoy (los 65 primeros puestos seguirán el fin de semana). Sergio García aspira a estar entre los candidatos al triunfo. Comenzó con buen pie. Salió a jugar con comodidad, con frescura, pese a compartir grupo con Bernhard Langer. Sus golpes de aproximación al green fueron sólidos y contundentes. Falló, eso sí, en los golpes cortos. "Si hubiera tenido más fortuna en el putt podría haber hecho una vuelta escandalosa", comentó El Niño. Fue un buen estreno para Sergio, quien se mostró descarado al comentar que no le importaría acceder hoy al liderato. "Me sienta bien ir de líder; si ocurre, no extrañaré la situación. Estoy acostumbrado". Ignacio Garrido, de 27 años, ya conoce el sabor de la victoria en el circuito continental, por su triunfo en el Open de Alemania en 1997. Es el más veterano de los jóvenes. Garrido inició el recorrido muy regular y se destacó en el segundo acto, con cuatro birdies y un eagle. "He jugado perfecto, sólido. El campo está facilito y los greens buenos", manifestó. Juan Carlos Aguero, de 23 años, fue la sorpresa. Natural de Pedreña, como su maestro Ballesteros, realizó su mejor vuelta desde su debut como profesional en 1997. Sin embargo, se mostró escéptico en el discurrir del torneo. "Hoy me he sentido cómodo; ya veremos si mantengo esta actitud los próximos días".