Mayor Oreja elude explicar al Congreso el "caso Bellavista" hasta que terminen las investigaciones

El ministro de Interior, Jaime Mayor Oreja, advirtió ayer en el Congreso de que no tiene intención de dar explicaciones sobre la muerte por un disparo de un guardia civil, en un control de alcoholemia, de la joven sevillana de 21 años Miriam Gómez Cuadrado hasta tanto no haya resultados de la investigación interna que ha abierto este cuerpo de seguridad del Estado y también de la instrucción judicial. El ministro, interpelado por la diputada Amparo Rubiales sobre el ya llamado caso Bellavista, calificó el hecho de "excepcional" y reprochó que se utilice el asunto para atacar al Gobierno.

La parlamentaria socialista por Sevilla calificó la respuesta del ministro como "inadmisible", al estimar que debe haber una aclaración política, e incluso una asunción de responsabilidades, al margen de las investigaciones preceptivas. El fondo de la intervención del ministro irritó a la diputada quien, no obstante, había empezado su intervención mostrando su "respeto y cariño" por la Guardia Civil. Pero Rubiales no consideró ayer adecuado que 12 días después de los hechos nadie haya dado una explicación. "No nos parece correcto que se utilicen armas de fuego en un control de alcoholemia y los hechos son muy graves por la desproporción entre los medios utilizados y el resultado producido; alguien tendrá que asumir responsabilidades políticas". La diputada del PSOE, ex delegada del Gobierno en Andalucía en el último mandato de Felipe González, recordó que "bajo la responsabilidad de instituciones gobernadas por el PP en Sevilla ha habido ocho muertos en cuatro meses sin que nadie haya asumido responsabilidades; si esto nos pasa a los socialistas en los meses previos a la Expo, por ejemplo, nos tendríamos que haber ido de España". El ministro no se apeó en su contrarréplica de su posición inicial, por lo que recalcó que no entrará en el fondo de este asunto hasta que no terminen las investigaciones. Y, mientras tanto, pidió que se mantenga la "confianza en la labor de la Guardia Civil", a pesar de este hecho "excepcional". Rubiales y el ministro se enzarzaron en otra polémica respecto a si Mayor Oreja se había comprometido o no a comparecer de inmediato en el Congreso durante una visita que realizó la semana pasada a Estados Unidos. Rubiales interpretó que sí y el afectado lo negó. Mayor Oreja, sin entrar en los hechos del 12 de abril, quiso recordar el dato de que este año se superarán los dos millones de controles de alcoholemia mientras que en el pasado ejercicio se efectuaron 1.600.000 sin incidentes de importancia. El ministro acabó su intervención con una defensa a ultranza de la labor del instituto armado: "No se defiende más a la Guardia Civil atacando al Gobierno, sino diciendo la verdad de las investigaciones que se están desarrollando". Precisamente hoy, las investigaciones judiciales van a continuar con la declaración del guardia que conducía el coche desde el que el brigada Pedro Jiménez hizo uso de su arma contra el vehículo que acababa de saltarse un control de alcoholemia en Dos Hermanas y al que dio caza de forma trágica en el barrio de Bellavista.