La juez Palacios cita a declarar como imputados en el "caso KIO" a los exaltos cargos de Hacienda

La juez de la Audiencia Nacional Teresa Palacios ha citado a declarar como imputados el próximo 10 de mayo a José María Huguet y Ernesto Aguiar, ex jefe de Inspección de Hacienda de Cataluña y exdirector general de Coordinación de Haciendas Territoriales, respectivamente. La citación responde a la denuncia presentada por la Fiscalía Anticorrupción. Mientras, el candidato socialista, Josep Borrell, con el que trabajaron los dos imputados durante su etapa como secretario de Estado de Hacienda, deploró ayer la "deslealtad personal" mostrada por ambos.

El propio Borrell emitió ayer un comunicado oficial de "condena" en el que "deplora" la conducta de dos de sus colaboradores (Huguet y Aguiar) durante su etapa como secretario de Estado de Hacienda. Ambos cobraron presuntamente más de 1.000 millones de pesetas del Grupo Torras a través de cuentas suizas, y han reconocido no haber declarado a Hacienda 470 millones obtenidos supuestamente de inversiones en valores. El PP criticó la incapacidad del candidato por so saber explicar esos comportamientos y por no saber elegir equipos. También le recordó su época de "perro de presa" en Hacienda contra los artistas.

El PSOE contraatacó lamentando las nulas explicaciones de José María Aznar sobre el caso Zamora, que los socialistas denominan ya caso Aznar. Además, instaron al PP a que interrogue al actual portavoz del Ejecutivo, el ministro catalán Josep Piqué, sobre las actuaciones "corruptas" de Javier de la Rosa, porque durante mucho tiempo ejerció como su auténtico número dos precisamente en el Grupo Torras.

El escándalo que afecta a los ex colaboradores de Borrell se ha convertido en el eje de cualquier intervención pública de los distintos portavoces del PP. Ayer mismo, el responsable del Grupo Popular en el Congreso, Luis de Grandes, lo sacó a colación tras la junta de portavoces sin venir a cuento de ningún punto abordado en el orden del día. Simplemente anunció: "Es necesario hablar de Borrell".

A continuación desgranó una retahíla de acusaciones contra el candidato, primero por su falta de aclaraciones sobre el caso y más tarde para criticar el contenido de la "notita de tres líneas" que la oficina de Borrell emitió sobre el asunto. Borrell salía con ese escrito oficialmente al paso de las demandas del PP de las últimas semanas. En el comunicado condena "enérgicamente las actuaciones desarrolladas por dos funcionarios públicos que han reconocido ya irregularidades en su conducta y que son objeto de graves acusaciones".

Borrell reafirma su "total y absoluto desconocimiento de tales hechos". También deplora esos comportamientos, porque "vulneran los principios que inspiran" su "trayectoria política y que suponen una grave deslealtad personal". Y finalizaba esperando y deseando que, "a la mayor urgencia y con la mayor claridad, tanto la Administración como la justicia aclaren los hechos y exijan las correspondientes responsabilidades".Luis de Grandes etiquetó esa respuesta de Borrell como "tardía, huidiza y bastante irresponsable y sin el más mínimo atisbo de credibilidad". El portavoz del PP se preguntó "quién vigila al vigilante", en alusión que relacionó con el pasado de Borrell y de sus dos ex colaboradores en Hacienda como "perros de presa del contribuyente y perseguidores de artistas".

Sobre los ex colaboradores de Borrell en la Agencia Tributaria, que en el PP identifican también como amigos personales y asesores actuales en la oficina del candidato, De Grandes añadió: "Los perseguidores del contribuyente y del fraude incurrieron en el terrible delito de ser defraudadores".El dirigente del PP se interrogó sobre cómo puede ser posible que Borrell no supiese nada de todo esto y dijo qué pensaría la sociedad de un candidato a presidente del Gobierno "con esa incapacidad de elegir equipos".

El "caso Piqué"

El portavoz del PSOE en el Congreso no aceptó bien los sarcasmos de su homólogo del PP. Luis Martínez Noval anunció que su partido se daría por satisfecho con una respuesta similar "en extensión y sinceridad" de Aznar sobre el caso Zamora. Luego se acogió a la ley de la gravedad para establecer una metáfora con la corrupción, al interpretar que la fuerza de ambas depende de su distancia y comentar que en el asunto del Grupo Torras el que más sabe de las corrupciones de Javier de la Rosa es precisamente Josep Piqué, "porque estaba muy cerca como su número dos".

Fuentes del PP precisaron más tarde que Piqué fue presidente de Torras en 1993 y que los pagos abonados por ese grupo a ex colaboradores de Borrell se produjeron antes. El conseller de Economía catalán, Artur Mas, expresó su convencimiento de que las irregularidades de los dos ex colaboradores de Borrell no afectan al candidato. [Richard Robinson, jefe de inversiones de KIO, ha negado que remitiera una carta a Javier de la Rosa para que pagara 1.900 millones a Manuel Prado y Colón de Carvajal tras la compra de una empresa belga por Torras].