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El Gobierno rechaza personarse como acusación en casos de agresiones nazis

Primer desacuerdo. Tras más de un año de participación en la ponencia parlamentaria sobre grupos violentos organizados, IU ha recibido un nada refrescante jarro de agua fría. El PP ya ha avanzado que rechazará la petición de la coalición de que el Gobierno regional se persone como acusación particular en los casos de agresiones neonazis. El PP también se niega a que la Comunidad amplíe la Ley de Protección de Víctimas del Terrorismo para dar cobertura a los afectados por este tipo de violencia.

Las peticiones de IU, que serán presentadas hoy en la Asamblea regional y ante las que el consejero de Presidencia, Jesús Pedroche, alega la falta de medios de la Comunidad para costear tantos abogados, parten de la constatación de que la responsabilidad de la Administración va más allá de la prevención y de la persecución de los grupos violentos. Estos movimientos, a juicio de la coalición, poseen unas constantes que los hacen fácilmente distinguibles: están perfectamente organizados (en asociaciones universitarias, deportivas y culturales), disponen de medios de comunicación (con direcciones y páginas propias en Internet), tienen carácter político y profundamente intolerante (sobre todo con otras religiones), usan simbología fascista, racista y nazi y dirigen sus pulsiones violentas y grupales contra mendigos, suramericanos y africanos. Otra característica estructural es la fuerte presencia en su seno de antiguos miembos de organizaciones fascistas de los años ochenta.Un aspecto destacado por IU en su análisis final corresponde a la actuación de la policía. Para los parlamentarios, las grandes operaciones emprendidas contra la posesión de armas blancas, la okupación de edificios o el tráfico de drogas en los poblados marginales producen "efectos perversos" que deberían ser estudiados con más atención. Por el contrario, IU aplaude el nuevo rumbo del plan Policía 2000.

Especial atención dedica la coalición a la denominada geografía de los grupos nazis. El primer terreno corresponde a los grupos ultras del fútbol, como el Frente Atlético y Ultra Sur. La coalición denuncia que desde los clubes se les ha financiado y dado cobertura.

Fuera de los campos de fútbol, IU localiza a estos grupos violentos en tres distritos (Chamberí, Moncloa y Centro), el Corredor del Henares (con grupos nazis en Alcalá, y violencia de fin de semana en Alcobendas y San Sebastián de los Reyes), el sur (Pinto, Parla y Getafe) y el norte (Collado Villalba y Majadahonda). En este contexto, IU rechaza lo que denomina los guetos de copas y que considera "un territorio donde actúan fácilmente estos grupos nazis".

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