Barcelona ofrece la experiencia de ayuda a Sarajevo para aplicarla a Kosovo

La ciudad de Barcelona está dispuesta a aplicar en Kosovo la experiencia adquirida en la ayuda a Bosnia, manifestó ayer el alcalde Joan Clos. El Ayuntamiento de la capital catalana ha creado una plataforma denominada Barcelona team con la organización no gubernamental Médicos Solidarios, que, en coordinación con el Alto Comisariado de Naciones Unidas para los refugiados (ACNUR) y la Unión Europea, canaliza la ayuda para los refugiados albanokosovares. En breve se entregarán cinco camiones con chófer para trasladar refugiados y material de los campos.

Aunque se está todavía a la espera de saber cuántos refugiados llegarán a Barcelona de los 2.000 que se espera recibir en Cataluña, el Ayuntamiento ofrece 20 camas de hospital para ellos. El alcalde también anunció un convenio de colaboración entre los ayuntamientos de Tirana, Skopje y Barcelona para encontrar salidas al éxodo kosovar. Clos destacó que ahora la prioridad principal son las aportaciones económicas que los ciudadanos pueden realizar en las cuentas corrientes que han abierto las administraciones públicas y diferentes organizaciones humanitarias. Pero el alcalde destacó que es necesario que "el compromiso de los ciudadanos se extienda en el tiempo" para poder solucionar el problema. Joan Clos pidió que los ciudadanos participen regularmente con ONG y que, los que puedan, colaboren económicamente "con continuidad". La aportación de material de urgencia y alimentos no es, según Clos, lo más práctico para ayudar a los refugiados porque, entre otras razones, el proceso de transporte y distribución es más complicado y costoso. De todas maneras, la concejal del Distrito 11 (entidad creada por el Ayuntamiento de Barcelona durante la guerra en Bosnia para colaborar en la reconstrucción del país), Teresa Sandoval, afirmó que el consistorio establecerá en toda Barcelona centros de recogida de material de urgencia. Ofrecimiento de Maragall La experiencia de la ayuda a Sarajevo fue recordada ayer por el ex alcalde de la ciudad y candidato a la presidencia de la Generalitat, Pasqual Maragall, que se ofreció a Clos y al presidente de la Generalitat para aportar la experiencia adquirida entonces en la reconstrucción de la ciudad y en la recuperación del diálogo intercultural una vez restablecida la paz. Maragall y Clos expusieron conjuntamente la posición adoptada por el consejo nacional del PSC ayer por la tarde sobre la crisis de Kosovo. Los socialistas catalanes se alinean punto por punto con la posición de los aliados. Consideran que el origen de la crisis son, como en el caso de Bosnia, "las acciones sistemáticas de reordenación y limpeza étnica emprendidas por un gobierno dictatorial". Eso justifica la intervención occidental, sostiene el PSC, que ha marcado "un punto de inflexión positivo". La declaración leída por Maragall afirma que Europa "no puede tolerar la persistencia en su ámbito de regímenes no democráticos y autoritarios que practiquen la limpieza étnica. El futuro de los Balcanes ha de basarse en la aceptación sin reservas de la democracia y en compromisos multiétnicos". Maragall defendió la conveniencia de fomentar la participación de las ciudades en el restablecimiento de los servicios públicos destruidos por la guerra en las zonas de conflicto y de lo que denomina diplomacia de segundo nivel. La crisis pone de nuevo de manifiesto, a juicio del PSC, la imperiosa necesidad de fomentar una política exterior y de defensa comunes de Europa, promover políticas de justicia e interior de ámbito europeo e impulsar los procesos de devolución de poderes a las administraciones locales y regionales.