Tabarot recurre el concurso del casino Costa Blanca

La empresa que explota el Casino Costa Blanca en la localidad alicantina de La Vila Joiosa ha presentado un recurso contra la subasta de bienes y el concurso de adjudicación de la licencia de explotación que pesan sobre la sala de juegos. La Consejería de Hacienda convocó un doble proceso ejecutivo y administrativo para intentar saldar la deuda acumulada por la sociedad Casino Costablanca, SA, por impago de las tasas sobre el juego, que supera en la actualidad los 2.300 millones de pesetas, según las estimaciones de los técnicos de la Generalitat. Casino Costablanca, sociedad que preside Roch Claude Tabarot, empresario francés afincado en Benidorm, interpuso hace diez días "un recurso muy sólido" que cuestiona las dos vertientes del concurso. Fuentes de la empresa que explota la sala consideran improbable que ningún empresario se arriesgue a participar en un proceso sujeto a problemas jurídicos y que requiere un importante desembolso. Los plazos para participar en la subasta de bienes de Casino Costa Blanca finalizan el próximo 9 de abril. Según las bases de la subasta el montante establecido por Hacienda como tipo mínimo de la subasta asciende a 2.317 millones de pesetas, que podrá ser mejorado al alza, y exige el desembolso de la quinta parte de esa cantidad, 460 millones. Fuentes de la Consejería admiten conocer el anuncio de interposición del recurso, pero todavía no han recibido traslado oficial de la notificación de parte del juzgado de lo contencioso administrativo y eluden pronunciarse sobre su contenido. El mecanismo habitual supone el traslado del expediente correspondiente al recurrente para que exponga las alegaciones que estime oportunas. El proceso jurídico puede dilatarse durante meses, incluso años, de modo que fuentes oficiales ni siquiera consideran la suspensión del doble concurso. Un portavoz de Casino Costablanca recuerda que los bienes de la sociedad fueron hipotecados para hacer frente al impago de las tasas sobre el juego correspondientes a los años 1993 y 1994 por un total de 511 millones de pesetas, tal como recoge el pliego de condiciones de la subasta, de modo que la sociedad podría paralizar el proceso ejecutivo desembolsando esa cantidad. Una opción que no impediría a Hacienda luchar por otras vías para cobrar la deuda total. Dos sociedades valencianas han optado al concurso de adjudicación de la licencia de explotación y a la paralela subasta de los bienes del casino.